EMOLTV

Las claves que explican el éxito del karate, uno de los deportes que más oros le dio a Chile en los Panamericanos

La disciplina logró tres preseas doradas, una plateada y una de bronce en Santiago 2023.

07 de Noviembre de 2023 | 09:30 | Redactado por S. Haddad, Emol.
imagen
Photosport
En la previa y haciendo un juego de proyecciones chilenas en los Panamericanos Santiago 2023, el karate aparecía como un nicho fiable de medallas y la realidad es que no defraudó. Tres oros, una plata y un bronce es el balance, convirtiéndose en uno de los deportes que más metales dorados sumó para el país, junto al atletismo y al remo, tras 18 días de competencias.


El progreso en comparación con Lima 2019 fue notorio, ya que hace cuatro años se había obtenido una medalla dorada dentro de un total de cuatro preseas. Para los karatecas estos Juegos fueron como sus “mini Juegos Olímpicos”, señalan, ya que la disciplina no es parte del programa de París 2024.

Una de las claves en este ciclo fue la llegada del entrenador egipcio Ahmed Solyman, quien por sus propios pupilos es catalogado como el artífice de este éxito.

“Él es la principal razón de estos resultados. Nosotros pasamos de ser una selección a ser un equipo, una familia quizás. Él ha sido muy metódico, ha ido en constante crecimiento, es muy autocrítico, eso también se ha notado porque hemos visto como los procesos que vivimos desde el 2020 hasta ahora han ido evolucionando y han sido mucho más eficientes", explica Camilo Velozo, que se adjudicó el bronce en -67kg.

Solyman dice que esa curva ascendente es notoria y ahora se puede medir en los objetivos ya cumplidos. “Nuestro equipo cada año es mejor que el anterior. En cada competencia se logran resultados históricos, vamos creciendo y eso se ve muy claro. En Lima se alcanzó un oro, hoy tenemos tres”.

Trabajo en equipo y mayor roce internacional


El primer oro se lo colgó Enrique Villalón, que se impuso en la categoría -60kg. El triunfo del osornino no estuvo exento de incertidumbre, ya que en principio había caído en semifinales ante el colombiano Juan Fernández, pero luego de la protesta del equipo nacional por una falla arbitral el combate se repitió y ganó. Luego vencería en la final. El episodio fue una muestra de la unidad y compañerismo que existe en el Team Chile, según describen los propios karatecas.

“Como equipo ha sido súper importante apoyarnos entre todos. Cuando yo me pongo a llorar en los entrenamientos todos mis compañeros me suben el ánimo, y al revés también”, cuenta Valentina Toro.

La estudiante de Ingeniería Industrial de la Usach se impuso en -55kg. Luego de un arranque complejo en que perdió su primer combate, se repuso y ganó su final con contundencia. Para ella, la clave es todo el trabajo que hay detrás para conseguir estos logros.

“Ha sido casi un año muy difícil como equipo. Nos hemos ido entrenar y a competir a Egipto, a Jordania, lo hemos pasado horrible. Con lesiones, llorando en los entrenamientos, solo nosotros sabemos todo lo que hemos vivido. Tenemos entrenador, preparador físico, sicólogo, la unidad médica. Tratamos de hacer las cosas bien, incluso los detalles más chicos. Mi entrenador no me deja ni siquiera hacer tiktoks”, detalla entre risas.

La mentalidad de no conformarse con segundos lugares también es otro factor que delatan las propias palabras de Tomás Freire, quien en un dramático desenlace se tuvo que conformar con la medalla de plata en -67kg. Freire, que es uno de los más jóvenes del equipo, dice que esa forma de pensar es clave y la tienen todos.


“No trabajamos para un segundo lugar, no sirve de nada. De los perdedores nadie se acuerda, soy un perdedor hoy. Es duro porque aferrarse a los resultados no es donde se valora el proceso. Estando muy lejos de la casa mucho tiempo, entrenando con los mejores del mundo. Pero esa es la mentalidad de este equipo, si llegamos a las finales es para ganarlas. Nadie se conforma con un segundo lugar”, explica.

Este éxito también estuvo marcado por la revancha para Rodrigo Rojas, quien había logrado un bronce en Lima, pero se desquitó llevándose el oro en casa en +84kg. Un trabajo de 10 años compitiendo en Juegos Panamericanos que finalmente tuvo su recompensa.

“Tuvimos que esperar cuatro años para conseguir esto. En Lima recuerdo haber salido con el bronce, llorando, no quería más. Estaba desconsolado mientras todos carreteaban después de los Juegos. Yo no quería nada porque buscaba la de oro y ahora se dio”.

Para Rojas, esta es una oportunidad para que se trabaje en el futuro y lo que le dejarán estos Juegos a su disciplina, además de las medallas. “El gran legado está en los niños. Puede haber mucha infraestructura, pero si no son usados, si no hay un niño que quiera cumplir un sueño, no podemos hacer nada. Las futuras generaciones es lo más importante, construir un legado a partir de esto”.

EL COMENTARISTA OPINA
¿Cómo puedo ser parte del Comentarista Opina?