Paraguay respondió fuerte tras el escándalo en el Mundial de talla baja.
Pantallazo
Sigue el escándalo tras la final del
Mundial de talla baja.
El local Argentina le estaba ganando 3-1 a Paraguay este viernes, pero antes de que terminara el duelo el elenco guaraní se retiró del partido.
¿La razón? Molestia por los fallos arbitrales y el comportamiento de los fanáticos trasandinos.
Después del tercer gol de la "Albiceleste", que llegó tras el cobro de una supuesta mano, el entrenador paraguayo Raúl Arviniagaldez fue expulsado por los reclamos y se le reubicó en la tribuna. Y al reanudarse el juego, desde el público le lanzaron una botella y hasta lo escupieron.
Luego de este bochorno, los paraguayos se lanzaron con todo en las redes sociales, posteando: "Robo Mundial".
No solo eso, Arviniagaldez expuso toda su rabia en conversación con el medio "Fútbol a lo Grande" de su país.
"Fue una vergüenza lo que pasó. Yo le dije a mis jugadores para retirarnos, no podíamos prestarnos a este robo", disparó.
En esa línea, el adiestrador agregó que "queríamos era que no sean árbitros argentinos. Los árbitros eran estudiantes, ni eran profesionales. No puede ser eso".
Así fue el escándalo y el retiro de Paraguay