Alegría azul en el Monumental.
Agencias/Emol
Universidad de Chile rompió la maldición. Este domingo, tras casi 23 años, volvió a ganar en el Monumental. Derrotó 1-0 a Colo Colo en el clásico.
Los azules eran pura euforia. Tras el pitazo final, los jugadores celebraron en la cancha mientras aumentaba el sonido de las pifias. Incluso se tomaron una foto en el círculo central para inmortalizar el momento.
"Faltaba esto, se acabó todo. Dedicárselo a la gente de la U que siempre estuvo con nosotros, nunca dejamos de creer. Este es el sentimiento de la U", dijo el capitán Marcelo Díaz.
En el camarín, que estaba decorado con insignias y banderas, la fiesta estudiantil continuó. Se entonaron varios cánticos de la barra Los de Abajo.
"Un minuto de silencio, para el indio que está muerto", gritó con alegría el plantel de la U.
Luego comenzó a sonar reguetón. Israel Poblete, autor del gol del triunfo, fue uno de los más animados de la fiesta y sacó sus mejores pasos en medio del vestuario. Leandro Fernández se sumó al baile.
Frente a los medios de comunicación, los jugadores se mostraron cautos. No hubo burlas ni frases ostentosas.
"Hay que tomarlo con mucha mesura. Queremos seguir ganando, ya hay que pensar en O'Higgins (el próximo rival) y solamente en eso", afirmó el golero Gabriel Castellón.
"Es un punto de partida para la U, venir a jugar acá, si bien la historia estaba, no juega, nosotros somos jugadores que no nos teníamos que hacer cargo de lo resultados anteriores, venimos sin esa mochila y creo que se notó. Ahora a festejar porque se logró algo muy importante", opinó el defensor Matías Zaldivia.
Una vez que todos los jugadores, el cuerpo técnico y los dirigentes se retiraron, los trabadores de la U sacaron un mensaje especial que habían dejado sobre la puerta del camarín: "Pasión infinita, locura total".
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