Colo Colo, lleno de suplentes, fue un desastre en Chillán. Perdió 3-0 con Ñublense y se empieza a complicar en el Campeonato Nacional.
Con la derrota, los albos están cuartos con diez puntos, a seis de la cima. Sin embargo, esa diferencia podría aumentar a nueve si la U vence este domingo a la Unión Española. Los "Diablos Rojos", en cambio, quedaron sextos, también con 10 unidades.
Pensando en el partido contra Fluminense del próximo martes por Copa Libertadores, Jorge Almirón puso un equipo alternativo en el estadio Nelson Oyarzún. Del once que le ganó a Cerro Porteño, solo Brayan Cortés repitió titularidad. Futbolistas como Carlos Palacios, Leonardo Gil, Arturo Vidal o Guillermo Paiva no fueron ni al banco. La diferencia fue muy grande.
Ñublense, que venía de dos derrotas seguidas, salió a presionar y fue superior desde el inicio. Sin ser del todo claro, el elenco local se generó ocasiones clarísimas para abrir la cuenta. Gabriel Graciani estrelló un balón en el poste y luego no pudo en un mano a mano con Cortés. Pero el argentino tendría revancha. Cuando ya se jugaban los descuentos de la primera mitad, recibió de Ismael Sosa, se llevó en velocidad a Emiliano Amor y puso la pelota contra el palo.
El contraste entre los oponentes era evidente. Colo Colo dejó una pálida imagen en la primera mitad. Sufría mucho en la salida y le costaba encadenar cinco o seis pases seguidos. Casi no se generó situaciones de riesgo.
Parecía que la situación iba a cambiar tras el regreso de camarines. El cuadro de Santiago se mostró más agresivo. Vicente Pizarro con un tiro libre y luego Damián Pizarro con una chilena casi convierten el empate, pero estuvo sólido el portero Nicola Pérez.
Sin embargo, tras ese prometedor arranque el "Cacique" se fue diluyendo. Si bien tenía la pelota, no era profundo y dependía en demasía de un arrebato individual.
A los 70' la escuadra dirigida por Mario Salas estiró la ventaja. Tiro libre de Sosa, Bernardo Cerezo apareció por detrás de Amor y conectó de cabeza para batir a Cortés.
Ese golpe terminó por hundir a los albos. Atacaban por inercia, sin convicción. Y aún faltaba algo más. En las postrimerías del encuentro, Alex Valdés le ganó en la banda a Jeyson Rojas, tiró el centro atrás y Patricio Rubio liquidó.
Colo Colo debe pasar rápido el mal trago y enfocarse en el duelo contra Fluminense. En Río enfrentará al campeón vigente de la Copa Libertadores. Almirón espera que la arriesgada apuesta de hoy valga la pena.
