Han más pasado más de dos semanas desde que anunció que se iba y diez días desde el último partido de la temporada. Pero hasta hoy, Gustavo Álvarez sigue siendo el entrenador de la U.
Las negociaciones entre el técnico argentino y Azul Azul comenzaron la semana pasada, sin embargo, por el momento no hay acuerdo. Clave los millones que hay en juego.
La cláusula de salida del DT es de 1.2 millones de dólares. Su contrato es hasta fines de 2026. Por ello, si se quiere ir, cómo lo expresó públicamente el 01 de diciembre, debe pagar. Esa es la postura del club.
Azul Azul considera que Álvarez tiene que asumir su deseo de partir y, por ende,
es quien debe desembolsar el dinero de la cláusula. Acercarse lo más posible a ella.
Hasta ahora rondan distintas versiones. Una es que desde la parte del entrenador ofertaron 250 mil dólares a la concesionaria. Otra que aún no existe ninguna propuesta formal en relación a montos. No es lo único.
También se dice que la selección peruana sería la gran interesada en llevarse a Álvarez y que estaría dispuesta a pagar lo que finalmente acuerde con la U.
Por el lado de Azul Azul también se abrirían a un pago en cuotas, de acuerdo a ESPN, siempre y cuando la cifra se acerque lo más posible a lo que establece la cláusula.
El sucesor, a la espera
Mientras las negociaciones para la salida de Álvarez se dilatan, la búsqueda de su reemplazante sigue en el elenco universitario, aunque no se puede oficializar nada hasta que la banca quede acéfala.
Eso sí, Azul Azul se mueve en silencio y hoy asoman dos grandes candidatos. El principal es el portugués Renato Paiva. El segundo es el argentino Martín Anselmi.
También han sonado Francisco "Paqui" Meneghini, sin embargo, tiene lista la renovación con O'Higgins. Ariel Holan, quien acaba de dejar Rosario Central, está en carpeta, aunque no convencería a todos en el directorio.
Paiva correría con ventaja. Las conversaciones irían fuerte con Azul Azul. Incluso, el técnico rechazó la oferta del Coritiba de Brasil.
Habrá que ver cómo avanzan los días para destrabar la salida de Álvarez y allanar la llegada del nuevo DT de la U.
