Christian Zapata, El Mercurio
SANTIAGO.- No ha sido un verano tranquilo al interior de la Central Unitaria de Trabajadores (CUT). Esto luego de que la Agrupación Nacional de Empleados Fiscales (ANEF), los Funcionarios de la Salud (Confusam) y la Federación de Trabajadores del Cobre (FTC) manifestaran su disposición a sumarse al Colegio de Profesores y congelar su participación de afiliación en la multisindical.
Si estas intenciones se oficializan luego de que cada gremio lo discuta en sus respectivas asambleas generales, la CUT perdería -al menos, momentáneamente- a más de 100 mil trabajadores afiliados, lo que representa cerca de un quinto del padrón electoral que se utilizó en las pasadas elecciones, informa
"El Mercurio".
Este posible congelamiento agrega otro problema a la Central: su financiamiento. Mensualmente, cada gremio debe pagar a la CUT una cuota de un 0,1% del salario mínimo -que a la fecha asciende a $264.000 según datos de la Dirección del Trabajo-, es decir, $264 por cada trabajador afiliado.
Por lo tanto, si esos 100 mil trabajadores dejan la CUT, esta dejaría de recibir por mes aproximadamente $26.400.000.
Mario Aguilar, presidente del Colegio de Profesores, señala que para el gremio que él dirige fue muy difícil la decisión de congelar su participación, pero que en la CUT "no hay transparencia financiera, no hay rendición de cuentas ni de egresos ni tampoco ingresos".
Si bien los gremios deben cumplir con las cuotas mensuales, estas no siempre están al día y se actualizan solo meses antes de la elección, ya que solo así los sindicatos pueden participar de las elecciones y actividades.
El presidente de la Confusam, Esteban Maturana, admite que ellos pagan sus cuotas con meses de desfase, pero que se debe a que "no tenemos confianza en la Central, no sabemos a dónde va a parar esa plata". Reconoce que "efectivamente hay un problema de transparencia en el manejo de las cuentas".
Pero la administración de los fondos no lo es todo: la razón de fondo que motivó a las agrupaciones sindicales a evaluar su cese de participación fue que en el Congreso Nacional Ampliado de la CUT -que se realizó a fines de enero- se estableció que las próximas elecciones de abril continuarán bajo un mecanismo de votación ponderada, donde votan los dirigentes sindicales y no los trabajadores directamente, en vez de una votación universal, es decir, un trabajador un voto.