SANTIAGO.- Un complejo escenario está experimentando el mercado de los destilados. Esto, ya que los consumidores chilenos han comenzado a diversificar sus preferencias en cuanto a bebidas alcohólicas se trata, hecho que ha generado que productos como el pisco y el ron pierdan terreno en términos de volumen de venta.
Así lo evidencian los datos de la Asociación Gremial de Fabricantes y Distribuidores de Licores y Bebidas Espirituosas de Chile (Aflechi), que revelan una baja de 13% en el consumo de destilados en los últimos seis años. Si en 2010 el volumen de ventas de estos productos totalizaba 68,3 millones de litros, durante el año pasado la cifra se redujo a 59,1 millones.
En este contexto, el presidente de Aflechi, Juan Pablo Solís de Ovando, comenta a
"El Mercurio" que "un factor que ha golpeado el consumo de las bebidas espirituosas es que ha aumentado el de vino, que estuvo decreciendo durante muchos años, pero que comenzó a repuntar producto de que los jóvenes están tomando más vino. Y el volumen de las cervezas, que también ha crecido".
Solís de Ovando añade que también han influido la promulgación de leyes que sancionan el consumo de alcohol en ciertos contextos, como es el caso de la Ley Emilia, y el estilo de vida más saludable que ha adoptado la sociedad chilena.
En este sentido, los datos de Aflechi muestran que las personas en Chile han comenzado a privilegiar el consumo de destilados con un mejor grado alcohólico.
"En Chile, lo que está creciendo mucho es la coctelería, de gin, vodka y de pisco, mediante la cual la gente quiere disfrutar de una bebida espirituosa, pero no algo tan fuerte. Lo otro que está creciendo mucho son todos los 'ice', por ejemplo Mistral Ice, Capel Ice, que es una categoría de entre 5 y 7 grados, que es mucho más cercana a una cerveza, y que está creciendo a niveles de dos dígitos en los últimos seis años", detalla.
Los más afectados
Menos suerte han tenido el pisco y el ron. Lo anterior, considerando que actualmente estas dos bebidas alcohólicas experimentan las mayores caídas en términos de volumen, tras descender un 4 y un 57% en los últimos seis años, respectivamente (ver infografía). De esta forma, si en el año 2010 los chilenos consumían 2,03 litros per cápita de pisco, en 2016 esa cifra se ubica en torno a los 1,9 litros. En cuanto al ron, el consumo por persona se redujo de 1,4 a 0,6 litros en el mismo lapso.
Si bien el volumen de consumo ha caído, el valor total de las ventas no ha ido en la misma dirección. Esto se explicaría porque la industria ha optado por generar una oferta premium para compensar a través de los precios la caída en volumen. "La industria de los espirituosos se ha defendido a través de la "premiumización", con productos de mayor calidad y precio", explica el presidente de Aflechi.
La industria de los destilados ha optado por generar productos premium para compensar, a través de los precios, la caída en el volumen de ventas.
Exportaciones de pisco
No solo para los consumidores nacionales el pisco ha perdido atractivo en los últimos años. Así lo muestran las cifras del Servicio Nacional de Aduanas, las cuales evidenciaron que en 2016 las exportaciones de pisco chileno se ubicaron en su menor nivel desde 2011.
De esta forma, si en el año 2015 Chile exportó US$ 3,1 millones de pisco, durante el año pasado esa cifra se situó en US$ 2,7 millones. En cuanto a la cantidad de litros, la cifra de envíos también se posicionó como la más baja de los últimos cinco años, tras exportar 379 mil litros.
Los montos registrados por Aduanas durante el año pasado están lejos de los más de US$ 3 millones de este destilado que exportó el país durante 2015, 2014 y 2013. Asimismo, durante estos mismos tres años el envío de litros fue de 438 mil, 501 mil y 488 mil, respectivamente.
En cambio, las cifras actuales se asemejan más a las cantidades que el país exportó en torno al año 2010 y 2011, cuando los envíos totalizaron US$ 1,6 millones y US$ 1,7 millones, respectivamente.
En cuanto a los embarques totales del producto nacional, el 33% se dirigió al continente europeo, siendo los principales mercados de destino Reino Unido, Rusia, Polonia y Alemania.
