SANTIAGO.- El Consejo del Banco Central acordó por unanimidad mantener la tasa de interés en 3,25% en la reunión de febrero. Así se detalló en las Minutas de la Reunión de Política Monetaria que publicó el ente rector este miércoles.
En la reunión, varios consejeros "llamaron la atención sobre la debilidad de la actividad local" e indicaron que estas cifras "eran difíciles de interpretar, pues coexistían factores cíclicos —como el ajuste del sector inmobiliario y la caída mayor que lo anticipado en la inversión minera— con choques más puntuales, como el paro del sector público".
"Sólo después de contar con algo más de información sobre los primeros meses del 2017, así como del cierre del 2016 en las cuentas nacionales, se podría distinguir mejor estos efectos", afirmó un consejero.
Comentó que "si la mayor parte de los choques eran más persistentes, simplemente por un efecto de base, el crecimiento del 2017 debería ser más bajo que el proyectado en el IPoM", y "si, por el contrario, los componentes transitorios eran muy fuertes y se revertían en los primeros meses del año, era muy posible que el escenario base del IPoM siguiera plenamente vigente".
Además, un consejero señaló que "el panorama para la actividad se mantenía incierto, pero debía priorizarse que las presiones inflacionarias relacionadas con los servicios y los salarios se mantendrían acotadas por un buen tiempo, confirmando que existía espacio para una política monetaria algo más expansiva".
En cuanto a la inflación, varios consejeros comentaron que si bien la había estado por sobre lo esperado en enero, "ello revertía sorpresas con signo opuesto en los meses previos",
En el plano externo, los consejeros concordaron que el escenario del último mes se había tornado algo más positivo, especialmente para las economías emergentes.
Mientras que un miembro del Consejo comentó que "seguía habiendo evidencia de una recuperación relevante en las principales economías desarrolladas, por lo que se mantenía la expectativa de normalización gradual de la política monetaria, especialmente en EE.UU.".
En el plano local, varios consejeros comentaron que si bien la inflación de enero había estado por sobre lo esperado, "ello revertía sorpresas con signo opuesto en los meses previos", mientras que otro consejero "resaltó que si bien la apreciación reciente del peso reducía las
perspectivas de inflación de corto plazo, llamaba la atención que las expectativas para fines de año y el 2018 se mantenían en torno a 3%".
