SANTIAGO.- Las clases ya comenzaron en algunos colegios y con ellas, más de 22.800 vehículos escolares iniciarán sus servicios en el país.
Si bien cada uno de estos transportistas debe cumplir con una serie de requisitos legales, no existen límites al cobro por este servicio. De hecho, desde la Confederación de Transportistas Escolares (Confentetuch) comentan que hace bastante tiempo que vienen intentando construir una tabla de valores para sus asociados, pero que finalmente lo que impera es el mercado.
"Son muchos los factores que influyen en el precio, entre ellos las distancias recorridas, los sectores y las características del vehículo", explica Verónica Contreras, presidenta del organismo a El Mercurio. Por otro lado, también influyen la comuna y el perfil socioeconómico del establecimiento.
Con estos antecedentes, no es extraño que los padres se encuentren con diferencias de más de 300% en el costo. Por ejemplo, en el caso de Chicureo, un trayecto entre un colegio en el sector de Chamisero y Batuco cuesta cerca de $130 mil al mes, ida y vuelta, mientras que llevar y traer a un niño en la comuna de Macul oscila entre los $30 mil y los $50 mil. Asimismo, un trayecto entre Providencia y Maipú puede costar $120 mil por mes.
Transportistas de la Región Metropolitana concuerdan en que estos son casos aislados y que la mayoría de los servicios se limitan a casas en las cercanías de los colegios.
Por ejemplo, un recorrido sólo de regreso para un alumno de un establecimiento de San Carlos de Apoquindo puede costar $48 mil al mes, si es que vive en la misma zona. Ahora bien, si es que su hogar está en La Dehesa, el precio sube a $52 mil.
En Providencia y La Reina, en tanto, el costo promedio por el servicio de regreso varía entre $30 mil y $40 mil al mes. Por otro lado, en comunas como La Florida, el viaje de vuelta fluctúa entre los $28 mil y los $35 mil, mientras que en Cerrillos entre $25 mil y $28 mil.
