SANTIAGO.- Este jueves Empresas Masvida dueña del 99% de la ex isapre, presentó ante el Juzgado de Garantía de Concepción una querella por estafa, apropiación indebida, extorsión y asociación ilícita contra quienes resulten responsables.
Acusan que fueron "engañados" en la venta de la cartera y en la situación real por la que atravesaba la isapre.
Esto pese a que en abril la junta de accionistas aprobó el traspaso de los 500 mil afiliados a Nexus, a través de su isapre Óptima, con la que se puso fin a la grave crisis financiera en la que se sumió la entidad.
Pero ahora afirman que fueron presionados para aceptar la oferta de Nexus, por un precio "vil", que estaba bajo mercado.
La operación constó de un primer pago por $8 mil millones, con el traspaso de afiliados, y otros $27 mil millones que se pagarían luego de que se apruebe la reorganización judicial de la isapre, lo que aún no ocurre.
Para argumentar estafa, la querella señala que el acuerdo al que llegaron el interventor de Masvida, Robert Rivas, y el representante de Nexus, Eduardo Sánchez, solo fue informado al presidente del directorio de Empresas Masvida, David Medina, el sábado 15 de abril, dos días antes de la junta clave del lunes 17.
Sin embargo, Rivas lo envió sin el Anexo N° 3, que contenía el Estado Financiero de la isapre por el lapso enero-febrero de 2017, documento que, si se les hubiera hecho llegar, según afirman, les habría permitido advertir que isapre producía "importantes utilidades financieras, y un EBITDA ampliamente positivo, y que no era productora de pérdidas".