SANTIAGO.- En diversos hechos esenciales Enel Generación (ex Endesa) y Colbún decidieron poner fin a la sociedad y al polémico proyecto hidroeléctrico HidroAysén.
"El directorio adoptó esta decisión, fundadamente, debido a que el valor de inversión en generación y transmisión previsto para el proyecto, sus costos de explotación asociados y las perspectivas de mercado de largo plazo, permiten concluir que el proyecto no es factible en términos económicos, en todos los posibles escenarios de evaluación", aseguró el presidente del directorio de HidroAysén, Juan Eduardo Vásquez.
"Adicionalmente, se consideró que la envergadura de la inversión y sus riesgos asociados, incluidos los judiciales y administrativos, agregaría un segundo factor de incertidumbre que impide definitivamente seguir adelante con el proyecto", puntualizó.
Por lo anterior, la mesa resolvió que la sociedad se desistirá de las acciones judiciales existentes en relación a la revocación de la Resolución de Calificación Ambiental (RCA) obtenida en el año 2011, al igual que de las acciones relacionadas con los procedimientos de solicitud de derechos de aprovechamiento de aguas iniciados en 2007 y renunciará a los derechos de agua que hasta ahora poseía.
Con el fin de hacer efectivo el cierre, el directorio convocó a una junta extraordinaria de accionistas para el próximo 22 de diciembre, a las 09:00 horas. En la ocasión se votará "la disolución y liquidación de la sociedad y la designación de la Comisión Liquidadora".
De acuerdo a las últimas estimaciones, la inversión prevista para la iniciativa superaba los US$10.000 millones.
En los estudios de ingeniería, medioambientales, legales y de promoción, Enel Gx y Colbún alcanzaron a desembolsar unos US$300 millones, la mayor parte de lo cual ya fue provisionado en el ejercicio 2014.
"En las bases la estrategia de crecimiento del Grupo Enel, es una decisión realizar proyectos que requieran no más de tres años para que estén completos, que sean cubiertos por contratos de venta de energía a largo plazo, que los haría económicamente viable, y finalmente, que sean aceptados por las comunidades y stakeholders en las áreas donde estos proyectos tendrían que ser desarrollados. Hidroaysen era un esquema que no satisfacía ninguno de estos tres criterios", indicó Francesco Starace, CEO de Enel.
En esa línea, el máximo ejecutivo de la italiana aseguró que "hoy se ha formalizado esta decisión devolviendo los derechos de agua al Estado de Chile para que se puedan aprovechar en otro tipo de iniciativas".
