SANTIAGO.- Cinco días llevan movilizados los trabajadores eventuales del puerto de Valparaíso, quienes exigen mejores condiciones laborales a sus empresas, lo que ha mantenido sin actividad a los terminales y generado efectos como la desviación de barcos de carga y un crucero hacia San Antonio.
La municipalidad y la Cámara Regional de Comercio de Valparaíso se han mostrado preocupadas por las consecuencias de la movilización y llamaron al diálogo entre las partes involucradas. De hecho, ayer el alcalde Jorge Sharp ofreció al municipio como espacio de encuentro para las negociaciones.
El dirigente del sindicato de estibadores de Valparaíso, Pablo Klimpel, aseguró que los empleados están abiertos a conversar para encontrar una solución al conflicto, que mantiene paralizados a todos los trabajadores eventuales, que son alrededor de 600 personas, según estimó el líder sindical.
Así, relató que ayer se juntaron con la municipalidad para coordinar una reunión con las empresas, tras lo cual afirmaron en una declaración pública que "hemos recibido el mensaje del alcalde Jorge Sharp y aceptamos la mesa de diálogo que nos propone la alcaldía ciudadana. Siempre hemos creído en el diálogo y en el buen entendimiento entre las partes".
"Nosotros estamos dispuestos a pensar en la posibilidad de atender el crucero el día sábado, que llega a TCVAL, si es que se concreta esta mesa de trabajo y llega a buen término", aseguró el dirigente, señalando que "si las empresas se presentan a conversar en la municipalidad con nosotros, vamos a tener al menos dos o tres días para estar conversando antes del sábado".
600trabajadores eventuales están en paro, según el dirigente Pablo Klimpel
¿Qué demandan los empleados movilizados? Klimpel explicó que el petitorio se basa en tres ejes. Uno de ellos es que que se lleve a cabo una mesa de trabajo con la compañía para tratar temas como las condiciones laborales y la seguridad. Además, solicitan que no hayan represalias para ningún trabajador a raíz del paro y un bono de compensación económica, que inicialmente sería de $3 millones, aunque el dirigente sostuvo que "obviamente todo es negociable".
Asimismo, reclaman respecto a la baja cantidad de turnos que prestan en los terminales. Esto se debe "por un lado a la dinámica del comercio exterior, que eso no es un factor que ni nosotros ni la empresa controlamos. Nosotros trabajamos en función de la oferta y la demanda, ya que llegan buques con carga para embarcar o descargar", comentó Klimpel.
No obstante, indicó que "el otro factor de por qué hacemos pocos turnos es porque hay una desregulación de los permisos para trabajar en el puerto, eso debido a la legislación laboral".
Al respecto, el dirigente sindical sostuvo que "entendemos que con el paro no vamos a cambiar el Código del Trabajo, estamos claros, pero sí podemos denunciar las consecuencias de la falta de regulación laboral".
Por ahora, Klimpel aseguró que la paralización es indefinida, a la espera de que se concrete una reunión entre los trabajadores y las empresas involucradas.
