Las ventas presenciales del comercio minorista en las regiones de Valparaíso, Biobío y La Araucanía nuevamente tuvieron un mes negativo, marcando caídas durante julio, aunque menos profundas que en los meses precedentes, según el índice mensual elaborado por el Departamento de Estadios de la Cámara Nacional de Comercio (CNC).
Así, las cuarentenas en varias comunas y la imposibilidad de abrir comercios producto de la pandemia continuó golpeando al sector durante el séptimo mes del año. En la Región de Valparaíso, las ventas minoristas apuntaron una baja real anual de 34,1%, un poco menos pronunciada que la de junio, cuando cayeron 37,6%.
Con esto, las ventas del comercio en esa región marcaron su quinto mes de fuertes retrocesos y acumulan un desplome del 24,8% entre enero y julio de 2020.
En tanto, el resultado por trimestre móvil da cuenta de una baja real de 36,9% en el período mayo-julio, "donde pese a ser una gran baja, se evidencia un quiebre en la tendencia negativa de los períodos previos", indicó el estudio.
En la Región del Biobío, la actividad comercial minorista registró un descenso de 12,1% real anual en julio, tras haber caído 12,1% en junio y mostrando una tendencia positiva en los últimos tres meses.
De esta manera, entre enero y julio en el Biobío se evidencia una baja de las ventas del sector de 18,6% real anual. En cuanto a trimestres móviles, se registró una baja de 16,1% en mayo-julio, significativamente menor al descenso de 27,7% del trimestre móvil previo.
Mientras que, en la Región de La Araucanía, el sector anotó una baja de 8,2% real anual en julio, frente a la caída de 21,8% en junio, dejando atrás cuatro meses de fuertes descensos y marcando una tendencia positiva en los últimos tres meses. Y al séptimo mes del año se acumuló un retroceso de 19,7% real.
Además, en La Araucanía, el comportamiento de los trimestres móviles da cuenta de "un quiebre en la tendencia negativa que se evidenciaba desde entre enero-marzo, anotando una baja de 22,5% en el periodo mayo-julio", expone el informe de la CNC.
"Las tres regiones en estudio marcan en mayo-julio un quiebre en la tendencia negativa que se venía evidenciando en los períodos previos, lo que podría dar cuesta de un punto de inflexión".
Bernardita Silva
"Las tres regiones en estudio experimentaron nuevamente bajas en las ventas minoristas presenciales durante el séptimo mes del año. Sin embargo, la magnitud de la caída difiere según región, mientras Valparaíso marca bajas en línea con junio, tanto Biobío como La Araucanía dan cuenta de una caída significativamente menor al mes anterior y de una tendencia positiva en los tres últimos meses", sostuvo Bernardita Silva, gerenta de estudios de la CNC.
Al analizar los trimestres móviles, Silva expuso que "las tres regiones en estudio marcan en mayo-julio un quiebre en la tendencia negativa que se venía evidenciando en los períodos previos, lo que podría dar cuesta de un punto de inflexión".
Detalle por categorías
Con respecto a las categorías estudiadas, señaló que "siguen siendo Vestuario y Calzado las más afectadas mientras que en el otro extremo la Línea Tradicional de Supermercado, que se asocia a bienes de primera necesidad y son locales que pueden abrir durante las cuarentenas, marcan bajas significativamente menores al resto de los rubros. Destaca también resultados positivos en Eléctricos y Hogar en Biobío y Araucanía, tras meses de fuertes caídas".
"Si bien las ventas físicas han sido las más dañadas ante la imposibilidad de poder abrir, los fuertes aumentos del canal digital no fueron suficientes para compensar la caída total del sector en el séptimo mes del año", acotó, añadiendo que "el termómetro semanal" de las ventas del retail que realiza la CNC y que incluye tanto ventas físicas como digitales a lo largo del país, "evidenció una baja promedio nominal de las ventas minoristas en julio de 18,1% y sin la categoría de supermercados el descenso promedio en el séptimo mes del año fue de 39,3%".
"Este mismo indicador adelanta que veremos mejores resultados a partir de agosto, de la mano del levantamiento de las cuarentenas en algunas comunas, tras meses de confinamiento donde se dejaron 'en espera' varias decisiones de compra, mayor apertura de locales, la entrega de ayuda por parte del Gobierno y el retiro del 10%, todas variables que han acelerado el consumo de los hogares", agregó Silva.
De todas formas, llamó a "mirar con cautela" estos resultados, ya que "lo que se está viviendo hoy es un impulso transitorio en el ingreso familiar que no se mantendrá en el tiempo por lo que el efecto tenderá a disiparse con el transcurso de los meses".