La falta de donantes y la poca información que se tiene al respecto llevó a la ingeniera civil industrial, Francisca González, a crear una aplicación móvil que mejora la comunicación entre los servicios de urgencias y las Unidades de Procuramiento.
Se trata de KEFURI, sistema que permite detectar la presencia de posibles donantes de órganos, proyecto que nació al interior de la Fundación para la Transferencia Tecnológica y la Universidad de Chile y que recibió apoyo de Corfo.
La aplicación, que puede ser descargada de manera gratuita, facilita la comunicación al prescindir de un número telefónico y comunicar el aviso de usuarios registrados, ayudando además a educar al personal en torno a este tema.
La iniciativa fue pilotada con éxito en el Hospital del Salvador, y hoy ya está siendo implementada en otros cuatro centros asistenciales del país. Dentro de estos, destacan los siguientes: Hospital Gustavo Fricke de Viña del Mar; el hospital San Camilo de San Felipe; el hospital San José y el hospital Luis Tisné, ambos de la Región Metropolitana.
Al respecto, la fundadora de la aplicación se refirió al financiamiento que han recibido para poder continuar con el proyecto: "Gracias a Corfo pudimos financiar la primera parte de la aplicación y probarla en el hospital Salvador y a partir de los resultados excelentes que tuvimos de ese proceso, pudimos postular a fondos privados. Fue así como llegamos en plena pandemia al hospital Luis Tisné, en la comuna de Peñalolén".
Gracias a lo anterior, González, sostuvo que "los resultados fueron increíbles, superando incluso las cifras obtenidas en su fase de pilotaje en el hospital del Salvador. Aumentamos en un 93 por ciento el número de posibles donantes con respecto a los años previos pero en el Luis Tisné a un año de uso lo aumentamos tres veces con respecto a los años anteriores, es decir, un 300 por ciento".