Nerviosismo existe en los mercados globales ante la nueva alza de tasas que anunciaría la Reserva Federal (Fed) a más tardar este miércoles, al término de su sexta reunión de política monetaria que comienza hoy.
Hasta la semana pasada, los analistas estimaban un alza de
75 puntos base, pero tras la publicación de nuevos antecedentes económicos, descartaron ese guarismo, dejándolo ahora en
100 puntos base.
Y es que en agosto, los precios en la potencia norteamericana aumentaron más de lo previsto en casi todos los rubros, desde vivienda a alimentos, lo que podría terminar convenciendo a la Fed de tomar medidas más drásticas en un intento por controlar la mayor persistencia inflacionaria vista en décadas.
En el detalle, el Índice de Precios al Consumidor (IPC) de Estados Unidos registró un alza de 0,1% en el octavo mes del año, según informó el Buró de Estadísticas Laborales, mientras que en la comparación interanual, la escalada de precios llegó a 8,3% frente a julio de 2021. El dato estuvo por sobre las expectativas de analistas, que apostaban por un aumento de 8,1%.
Con este registro sobre la mesa, el banco de inversión JP Morgan ajustó sus proyecciones, indicando en un comunicado que "el escenario para un movimiento más grande que nuestro esperado 75 puntos base es razonable, aunque también vimos ese caso en las reuniones anteriores y por alguna razón el Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC, por sus siglas en inglés) eligió llegar a donde están yendo en una serie de movimientos más pequeños".
Por su parte, el banco suizo Julius Baer revisó a 75 puntos básicos su proyección de incremento en las tasas de interés de la Reserva Federal de los Estados Unidos. "La inflación de agosto en Estados Unidos volvió a desacelerarse (+0,1%), pero menos de lo esperado (-0,1%), lo que mantiene la presión sobre la Reserva Federal para que vuelva a subir los tipos de interés en su próxima reunión del Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC) a finales de este mes", indicó.
"El escenario para un movimiento más grande que nuestro esperado 75 puntos base es razonable, aunque también vimos ese caso en las reuniones anteriores y por alguna razón el Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC, por sus siglas en inglés) eligió llegar a donde están yendo en una serie de movimientos más pequeños"
JP Morgan
"Por tanto, hemos revisado nuestras previsiones y ahora esperamos otra subida de tipos de 75 puntos básicos el 21 de septiembre", manifestó en un informe.
Cabe mencionar que la mayor economía del mundo está mostrando signos de una tímida desaceleración en la demanda, sobre todo en el sector inmobiliario o incluso en el manufacturero. Pero, "como era de esperar, la Fed volverá a subir las tasas en 75 puntos básicos", sostiene Nancy Vanden Houten, de Oxford Economics.
La entidad monetaria ya procedió a una fuerte alza en junio, la mayor desde 1994, y volvió a hacerlo al mes siguiente. En total, desde marzo las tasas aumentaron en cuatro oportunidades.
Actualmente, la tasa de referencia en Estados Unidos se sitúa entre 2,25% y 2,50%, en línea con los incrementos paulatinos que ha aplicado la Fed con el objetivo de encarecer el crédito para particulares y empresas, para ralentizar el consumo y la inversión.
Su homólogo europeo, el BCE, también asestó un golpe a la inflación a principios de septiembre al subir sus tipos en 75 puntos básicos, algo inédito desde la creación del euro.
Además de su decisión sobre las tasas de interés, la Fed actualizará sus previsiones de crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB), la inflación y el nivel de desempleo.
Las positivas cifras del mercado laboral le da a la Fed cierto margen para actuar con agresividad. La tasa de desempleo de Estados Unidos se ubica en 3,7%, una de las más bajas en los últimos 50 años, y no hay suficientes trabajadores para cubrir todas las vacantes.