Este martes, el ministro de Hacienda, Mario Marcel, y su par de Obras Públicas, Juan Carlos García detallaron en qué consiste el ajuste de contratos con las constructoras y el alcance que tendría esta medidas. Todo esto, enmarcado en la crisis que se está atravesando el rubro después de la pandemia, el alza de los precios de los materiales y la burocracia estatal que muchas veces traba los proyectos.
Con el objetivo de impulsar la reactivación del sector, jefe de al cartera de Obras Púbicas sostuvo que "hemos tomado una medida inédita y completamente responsable en nuestro país. Es una medida donde reconocemos el alza de materiales que han sufrido las empresas desde años anteriores y hemos incorporado un reajuste de manera retroactiva a los contratos que tenemos hoy día como MOP".
"Este reajuste que parte el mes de septiembre del año pasado y continuará a todos los contratos que tenemos vigentes que están en curso y que no han tenido incumplimiento de pagos, nos permitirá hacer que 1.400 contratos, más e 400 empresas, se verá beneficiadas con esta medida (...) son 1.400 contratos que nos generarán 30 mil empleos mensuales que queremos cuidar", agregó el ministro.
García explicó que "este es un reajuste voluntario, por ende las empresas van a tener que expresar su interés, nosotros como MOP no modificamos unilateralmente los contratos, y los contratos tienen hasta el 31 de marzo para expresar su voluntad".
Además, "este reajuste tiene un tope máximo de un 20% de la oferta entregada y aprobada al momento de adjudicarse la licitación, de manera de acotar este reajuste. El propósito que tiene que no es salvar la empresa propiamente tal, si no salvar los contratos que hoy tenemos en curso".
Sobre la preocupación que han levantado algunas empresas por quedar fuera de esta medida, el ministro de Obras Públicas señaló que "tenemos que acortar estas medidas a situaciones de urgencia, cuando hacemos este tipo de medidas siempre van haber algunas empresas que puedan quedar fuera, pero lo importante es el volumen de la inversión y el volumen de este esfuerzo".
Gasto fiscal
Sobre los recursos que implica esta medida, el ministro de Mario Mario Marcel sostuvo que "es alrededor de US$380 millones, que están dentro del presupuesto del MOP de este año, esto no implica un gasto adicional, pero si asegurar que lo que estaba presupuestado efectivamente se va a gastar".
"Con esto estamos respondiendo a una crisis que se ha producido en el sector de la construcción, pero por otro lado estamos asegurando que las obras que están comprometidas se ejecuten y que la inversión que es tan necesaria en este momento en Chile pueda el Estado hacer un aporte significativo tanto en el 2022 como en el 2023", añadió el jefe de la billetera fiscal.
