Con el alza de las ventas por e-commerce, las empresas comenzaron a poner especial atención en la "última milla", etapa final de la cadena de logística en la cual el producto llega a su destino, el consumidor.
Sin embargo, con el crecimiento de los centros de distribución y la mayor demanda de las ventas en línea, la tecnología comenzó a ser relevante en todo el proceso, empezando a invadir la primera milla.
¿Qué es la primera milla? Hace referencia a todos los procesos anteriores que se deben realizar para que el producto se despache. Dentro de las etapas, destacan las siguientes: internación y distribución a bodegas, traslados a centros de distribución, coordinación entre proveedores, gestión de carga y distribuciones de productos a tienda.
Al respecto, Álvaro Echeverría, CEO de SimpliRoute, destacó que “el e-commerce pasó de representar una parte marginal de las ventas de empresas, a una tajada considerable de la facturación. Eso explica el auge de nuevos centros de distribución, bodegas y darks stores. Si se complejiza el sistema, la tecnología es crucial para que no se vuelva un problema".
En cuanto a los hitos de primera milla de SimpliRoute, la compañía acaba de cerrar una alianza con Walmart, que permite al retailer gestionar su proceso de carga de camiones en los distintos puertos de sus centros de distribución.
