José Tomás ValenteCofundador y CEO de Betterplan
Una ayuda a gestionar tu patrimonio a través de recomendaciones personalizadas y acceso a una amplia variedad de alternativas de inversión. Así describe José Tomás Valente lo que es Betterplan.
Una fintech que fue fundada en octubre de 2020 en plena pandemia. La idea comenzó a surgir en 2018 cuando Valente estudiaba en Harvard.
"Desde antes venía conociendo el mundo de los multi-family office y empresas dedicadas a gestionar los altos patrimonios, pero fue recién en ese año, mientras tomaba un curso de emprendimiento cuando cuajó la idea de combinar el servicio que actualmente entregan los multi-family office a las personas de alto patrimonio con la tecnología", agregó.
En una nueva edición de "Lo pensó/lo hizo" de Emol, Valente cuenta como nació la idea de asesorar inversiones personales y cuáles son las proyecciones de expansión de su cartera de clientes.
Betterplan es una empresa de wealth management digital e independiente. En otras palabras, es una empresa que te ayuda a gestionar tu patrimonio a través de recomendaciones personalizadas y acceso a una amplia variedad de alternativas de inversión.
Por un lado tenemos una plataforma tecnológica que hace todo mucho más fácil y accesible. Por otro, nuestra independencia -el no estar atados a un banco o administradora de fondos particular- nos permite evitar los conflictos de interés a la hora de recomendar donde invertir.
Nunca en la historia han existido tantas alternativas de inversión como hoy. Hay decenas de administradoras de fondos locales e internacionales, y si no eres alguien que se dedica al mundo de las inversiones, es fácil tomar malas decisiones. Betterplan combina lo mejor del mundo tradicional -la confianza y cercanía de un asesor-, con la tecnología de una plataforma fintech.
La idea surge en 2018, cuando me encontraba estudiando en Harvard. Desde antes venía conociendo el mundo de los multi-family office y empresas dedicadas a gestionar los altos patrimonios, pero fue recién en ese año, mientras tomaba un curso de emprendimiento en la universidad vecina -MIT-, cuando cuajó la idea de combinar el servicio que actualmente entregan los multi-family office a las personas de alto patrimonio con la tecnología. Esa fue la génesis de Betterplan y llevar este servicio de gestión patrimonial independiente a más personas es nuestro norte y lo que nos mueve día a día.
R: El primer aporte fue un premio que nos ganamos en The Martin Trust Center for MIT Entrepreneurship, luego en 2019 ingresó a la propiedad un family office chileno. La última ronda de levantamiento de capital estuvo liderada por dos fondos de venture capital, HCS Capital y Vulcano.
Uno de nuestros pilares, y algo que nos diferencia de la mayoría de los asesores tradicionales, es nuestro cobro. Cobramos un porcentaje sobre el patrimonio total asesorado, algo que hoy es el estándar sólo en los multi-family más grandes de Chile. En general, los asesores siguen cobrando a través de rebates, o sea los fondos que ellos recomiendan son los que les pagan, lo que en nuestra visión presenta un claro conflicto de interés.
En nuestra industria a nuestro público objetivo se le llama “Mass Affluent”, un segmento que está arriba del segmento retail, pero al cual las bancas de inversión tradicionales no le dan buen servicio. El segmento mass affluent suele estar compuesto por profesionales con buena trayectoria laboral, que buscan recibir un buen nivel de asesoría y tener acceso a una variada gama de alternativas de inversión. En cuanto al rango etario, la mayoría tiene entre 35 y 50 años, aunque es llamativa la cantidad de personas mayores que también están felices con el modelo y servicio que ofrece Betterplan.
Nuestra principal competencia son los actores financieros tradicionales. A su vez, los clientes que aspiran a una mejor atención que la que le brindan estas instituciones son nuestra gran oportunidad. Personas que hoy reciben recomendaciones para invertir en ciertos fondos mutuos pero no un verdadero servicio de gestión patrimonial independiente.
Buscamos que cada vez más inversionistas puedan alcanzar sus sueños a través de un plan financiero hecho a medida. Nuestra misión es estar con ellos en cada etapa y en cada decisión financiera, sea cual sea el objetivo, como comprar una casa, ahorrar para los estudios de sus hijos o asegurarse una buena jubilación.
El propósito de Betterplan es revolucionar la industria del wealth management a través de dar acceso a más gente a un servicio de gestión patrimonial sin conflicto de interés; servicio que hoy ya entregan los multi-family office más tradicionales a las familias de muy alto patrimonio.
Nuestro desafío está en continuar acelerando nuestro crecimiento. Hoy estamos muy optimistas y así lo muestran nuestros resultados de los últimos meses. Todas las startups tenemos un camino difícil, pero hay algunas cifras que nos indican que estamos en lo correcto. Él año pasado, cerca del 70% de nuestros clientes invirtieron dineros adicionales con nosotros y durante los primeros dos meses del 2024 más del 45% de clientes volvió a invertir; un número que nos ilusiona mucho.
Los mercados desarrollados tienen un nivel muy superior de profundidad y desarrollo del mercado de capitales. Sin embargo, Chile destaca a nivel latinoamericano, por lo que crear una plataforma exitosa en Chile es un muy buen primer paso para la expansión regional.
Admiro la trayectoria de John Bogle, el fundador de Vanguard -una de las empresas de administración de activos más grandes del mundo- y creador del primer fondo índice. Bogle fue el primero en permitir invertir de manera fácil, diversificada y a bajo costo en las acciones americanas. Cuándo lanzó en 1976 este primer fondo indexado de bajo costo no tuvo éxito inmediato, incluso llegaron a llamar a este nuevo fondo “La locura de Bogle”.
Pasados casi 50 años desde ese momento, hoy los fondos índices y los fondos transados en bolsa (ETF) han logrado revolucionar completamente el mundo de las inversiones, permitiendo que todos invirtamos de manera diversificada y a una fracción del costo de un fondo mutuo tradicional. Estos billones de dólares que Bogle logró traspasar desde comisiones para los fondos mutuos a rentabilidades para los inversionistas es lo que hace que sea una de las personas que más admiro.
Cuando uno lidera un emprendimiento vive a un ritmo tan frenético que un plazo de cinco años suena muy lejano.
Me encanta la economía, soy un fanático del mundo de las inversiones, y estoy convencido que la tecnología y la independencia son el futuro del wealth management, por lo que espero estar trabajando en lo mismo, pero ayudando a muchas más personas en más países.
Me gustaría aprovechar de destacar a todos aquellos que ayudaron a formar el sistema financiero chileno como lo conocemos hoy, especialmente en el ámbito de las inversiones. Empresarios que formaron empresas como Celfín, IM Trust, Compass y Moneda, que luego fueron adquiridas por extranjeros, y otras más que siguen siendo de dueños locales. Si bien en Betterplan creemos que hay tareas pendientes, como reducir los conflictos de interés, también reconocemos todo lo que se ha avanzado.
También admiro mucho a los grandes multi-family office de Chile, como Econsult, Capital Advisors y Picton, entre otros, ya que fueron ellos los primeros en demostrar la importancia que tiene que aquel que te asesore sea alguien sin conflictos de interés, cuyo único foco sean las inversiones. Betterplan toma a ellos como referente y a través de la tecnología busca llevar este servicio a más personas.
Todos los países tienen oportunidades de inversión, sólo que entre más riesgoso el país más rendimiento tienes que exigirle a la inversión. En el caso de Chile, nuestra institucionalidad ha tambaleado y las reglas que rigen los grandes proyectos a veces son poco claras, lo que ha tenido su efecto en los premios por riesgo y en los niveles de inversión. Sin embargo, soy optimista que vamos a salir adelante. La economía ha venido mejorando y confío en que nos pondremos de acuerdo en un marco regulatorio que permita seguir disminuyendo la incertidumbre.
El Estado es fundamental en nuestra industria, ya que necesitas una institucionalidad sólida para tener un mercado financiero que funcione bien. En ese sentido, agradezco los esfuerzos de la Comisión para el Mercado Financiero (CMF) por regular a los asesores de inversión y las plataformas de asesoría.
En términos más generales, lo que echo de menos en el último tiempo es un mayor entendimiento de cuán importante es tener un mercado financiero profundo, líquido y competitivo para el país. Se piensa que el mercado financiero sólo sirve para unos pocos, pero la verdad es que cuando nos comparamos con nuestros vecinos vemos cómo el tener un mercado financiero más desarrollado nos permite que todos accedan a mejores créditos, mejores inversiones, y mejores servicios financieros.
Mis máximas para invertir bien son: La consistencia le gana a la perfección. La complejidad no es una virtud. El autocontrol le gana a la inteligencia. Los optimistas le ganan a los pesimistas. El mercado no siempre pero generalmente tiene razón. Es más fácil explicar el pasado que predecir el futuro. Acepta las pérdidas temporales. No sigas las inversiones de moda. Todas las crisis son distintas. No tomes más riesgo del que puedes aguantar. Diversifica. El tiempo es tu aliado. Un buen plan de inversión es aburrido. La riqueza se construye lentamente.