Las autoridades han endurecido fuertemente el tono en contra de las empresas de distribución eléctrica producto del prolongado corte de suministro que continúa afectando a miles de familias en la Región Metropolitana, luego de las intensas lluvias y ráfagas de vientos de la semana pasada.
Según los últimos reportes de CGE y Enel, unos 200 mil clientes se mantienen sin suministro en la capital, situación qye ha provocado manifestaciones, ataques a sucursales de Enel y anuncios de demandas colectivas debido a las miles de personas que han visto afectada su calidad de vida, han perdido alimentos o no pueden contar con refrigeración para sus insumos médicos, entre otros aspectos.
"Los tiempos de respuesta en reposición del servicio, según los estándares obligatorios para las empresas no se han cumplido. Estamos trabajando en formulaciones de cargo, sanciones y compensaciones", sostuvo esta mañana el ministro de Energía,
Diego Pardow, a radio Cooperativa.
El secretario de Estado subrayó que todo lo que dice relación con reposición del servicio y entrega de información a clientes y autoridades "ha sido muy deficiente y ha hecho que a la reposición del servicio, que ha tomado mucho más tiempo del necesario, se agregue a factores de ansiedad a familias y hogares que no corresponde".
"Nosotros como Gobierno no solo hemos estado poniéndonos a disposición de lo que se puede hacer para colaborar con reposición del servicio (...) sino que también como canal de comunicación con las autoridades territoriales. Pero la verdad es que la respuesta que hemos tenido especialmente en temas de comunicación de información ha sido muy ineficiente, especialmente en RM", subrayó Pardow.
Asimismo, el ministro coincidió con el diagnóstico de algunas autoridades que han calificado de "vergonzoso" el actuar de Enel, y si bien sostuvo que existen problemas de fondo en el sistema eléctrico y mejoras de deben implementarse, estas -resaltó- no pueden justificar las deficiencias que han mostrado las empresas.
"Es importante que cuando discutamos el fondo, que es algo que tenemos que hacer, no sea una manera de justificar lo que acaba de ocurrir", manifestó. "Las causas estructurales y mejoras que se puedan hacer, no pueden ser una excusa para lo que ocurrió a partir del jueves", insistió.