La ministra del Trabajo, Jeannette Jara, asistió ayer a un encuentro organizado por Icare, en el que dio cuenta de la mirada del Gobierno en torno a la realidad del mercado laboral. En la instancia, la titular de la cartera se alejó del diagnóstico planteado insistentemente por el economista David Bravo, también presente, que ha apunta a una "emergencia laboral no declarada". "A algunas personas les gustan harto los eslóganes. Lo que han demostrado los datos es que hemos recuperado 550 mil puestos de trabajo", aseveró Jara. Agregó a su argumentación el retroceso de la tasa de desempleo, desde el 9% que exhibía en agosto del año pasado hasta el 8,3% del último dato oficial, así como la baja de la inflación. "Hay que atenerse a los hechos más integralmente", sostuvo. Bravó, por su parte, no ignora que el escenario actual es mejor al registrado durante el ciclo negativo entre la pandemia y 2022. Su hipóteis, no obstante, apunta a que los efectos de esa crisis todavía no se revierten. "No deberíamos llamar a lo que estamos teniendo 'crecimiento' del empleo", dijo.
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