Ripley decidió cerrar dos de sus tiendas emblemáticas deslizando motivos de rentabilidad, entre otras razones. Una de ellas, histórica para el centro de Santiago, siendo la primera de la cadena, abierta en 1964, ubicada en la calle Huérfanos 967 e inaugurada por los hermanos Marcelo Calderón y Alberto Calderón.
El otro local está emplazado en Concepción, en la calle Barros Arana 839 y es el primero de la compañía en iniciar actividades en regiones. Así, Ripley se suma a los otros grandes del retail en chileno en cerrar tiendas icónicas.
"En la compañía estamos siempre evaluando nuestras distintas áreas de gestión, con foco en la experiencia que tienen los clientes y en la rentabilidad que ellas representan, lo que nos llevó a cerrar dos tiendas (con ingresos que representan menos del 1% de la empresa", dijo la compañía en una declaración.
"Asimismo, hemos sostenido conversaciones con los colaboradores para comunicarles que privilegiamos su continuidad de trabajo en otras tiendas de la compañía", agregó.
Son varios los locales comerciales que han ido bajando sus cortinas en el centro, que han ido perdiendo terreno como plaza de interés para los comerciantes, ante los problemas de seguridad que han afectado el flujo de visitas, el incremento del comercio ambulante y los horarios más. . . . . . acotados desde la épica del estallido y pandemia.
La primera tienda de Ripley
Se trata de cierres similares a los que ha realizado Falabella y se dan en un contexto de optimización de puntos de venta. La firma de los Solari, Cúneo y Del Río ha cesado varias tiendas desde hace un tiempo, incluyendo también algunas emblemáticas.
Una de ellas fue la superficie que operaba en Ricardo Lyon, que cerró en febrero pasado en Providencia. La firma tomó la decisión de poner fin al representante local que se inauguró el 24 de febrero de 1992, hace más de 30 años, época en la que en Providencia abundaban las grandes marcas como parte del paisaje de la avenido del mismo nombre y la ex. . . . . . 11 de Septiembre, hoy Nueva Providencia.
Aunque otro de los motivos de este cierre obedecía a que Falabella se instaló con una tienda de 8.200 metros cuadrados en el Costanera Center hace unos años, y el énfasis de la compañía estaba en ese desarrollo.
La firma también había comunicado en agosto del año pasado el cese de su tienda en San Bernardo en Mallplaza Sur, programado para octubre de ese ejercicio, cuando concluía el contrato con el centro comercial.
Otro actor que bajó las cortinas en el centro en 2021 fue Paris, perteneciente a Cencosud. En esa oportunidad el cese de actividades afectó a la tienda en calle Alameda con San Antonio, tras 72 años de operaciones.
El argumento en aquella ocasión fue el mismo: la tienda es poco rentable y la decisión se enmarcaba en un proceso de reestructuración. También aludieron al foco que estaban poniendo en plataformas online.
