SANTIAGO.- Todos los años los animadores del Festival de Viña del Mar, Carolina de Moras y Rafael Araneda, deben destinar meses a la elección de los vestuarios que lucirán durante las seis noches del evento. Y es que las expectativas siempre son altas, sobre todo si se considera que la anfitriona suele deslumbrar con su look y su semblante de modelo.
Con casi 1 metro y 80 centímetros de altura, Moras eligió un vestido rosado con un pronunciado escote para subir a la Quinta Vergara junto a Araneda.
En el escenario, los animadores cumplieron con el ya tradicional beso que pedía a gritos el "monstruo", pero esta vez la iniciativa la tomo de Moras y besó a su homólogo para dar inicio a la semana festivalera.
El vestido que la animadora de Chilevisión utilizó durante la apertura de la primera noche del "festival de los festivales" fue altamente comentado en redes sociales.
En Twitter varios usuarios lo elogiaron, pero otros lo desaprobaron utilizando una serie de creativos calificativos.