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Las mujeres fuertes del Festival hablan de las mayores dificultades que enfrentaron en esta edición

La productora ejecutiva, Catalina Yudin, y la productora general, Carla Ruz, hablaron con Emol sobre las situaciones y momentos más complejos de la versión 58 de la cita viñamarina.

26 de Febrero de 2017 | 20:30 | Carolina Cerda, enviada especial a Viña del Mar
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Carla Ruiz y Catalina Yudin.

El Mercurio.
VIÑA DEL MAR .- La cara más visible del Festival internacional de Viña del Mar es el director general del evento, Álex Hernández. Pero sin el trabajo de dos mujeres - la productora ejecutiva, Catalina Yudin, y la productora general, Carla Ruz-, Hernández no tendría músicos, jurados, ni un elaborado montaje escénico que llevar a las pantallas de la región. Así de importante es la labor de Ruz y Yudin.

A pesar de que son un equipo que funciona coordinadísimo, eso no implica que este año no se hayan visto afectadas por una serie de problemas relacionados con el Festival. Aquí, la lista de las mayores dificultades de la versión 58 que hicieron para Emol.

El factor Maluma y su estadía

La misión no parecía tan compleja: lograr que Maluma se quedara junto a su familia en una casa que le diera privacidad durante su larga estadía en la quinta región. No fue tan fácil como pensaron inicialmente. "Yo sabía que (el fanatismo por Maluma) era una locura, pero no lo dimensionaba. Pensaba, 'Ya, al segundo día la gente se va a aburrir de estar ahí afuera', pero estuvieron ahí la semana completita. Un día puse el matinal de TVN y había un dron arriba de la casa. Ya escapaba de nuestras manos", dice Yudin.

"Este fue un gran tema, desde conseguir la casa, que ellos la chequearan, la seguridad, todo era un problema. Los vecinos alegaron", agrega para graficar el drama que incluso llevó a que carabineros desalojará a algunos fanáticos que se quedaban a alojar en el vecindario... cantando sin importar que fuera de noche.

La remodelación del hotel San Martín

Para los organizadores del Festival siempre ha sido un problema la falta de camas que hay en la ciudad para alojar a los equipos y a los artistas. Esto empeoró este año con el cierre del hotel San Martín para un proceso de remodelación y, básicamente, perdieron 140 habitaciones.

Yudin explica que fue un tremendo problema para la producción. "Es un problema que no tenía mucha solución". En estricto rigor, sí se podía arreglar, pero de un modo complejo: usaron hoteles pequeños y boutique de alrededor de diez piezas, pero eso implicó que debían igualar las condiciones entre los distintos lugares.

El montaje para Isabel Pantoja

"Fue complicado por la cantidad de músicos en escena y por los requerimientos técnicos de que efectivamente de que aquí no veían instrumentos secuenciados, sino que tocaban en vivo todos", cuenta Ruz.

Más allá de meter a más de 90 músicos en el escenario, se enfrentaron a detalles logísticos como movilizarlos, alimentarlos, acreditarlos y asegurar temas que suenan tan triviales como que las sillas se vean de manera uniforme: "Nos faltaron cinco fundas y las tuve que mandar a hacer a las niñas de vestuario del canal. Fue el mismo día del show, luego de que terminó de ensayar después de las seis de la tarde: tenían muy poco tiempo para hacerlas". La única dificultad de la que se salvaron fue el conseguir alojamiento, pues siempre se planificó que viajaran por el día.

El cambio de letra de la canción de Cuba

Danay Suárez decidió cambiar la letra de "Yo aprendí" y puso en jaque la competencia internacional. "Fue un problema tan grande que no se pudo dar una solución el mismo día", dice Yudin y Ruz complementa: "Nunca nos había pasado en la historia del Festival. Nos volvimos locos. Tuvimos que hacer de inmediato una reunión con la gente del departamento legal del canal donde estuvieron convocados todos: la comisión Festival, presidente ejecutivo, Álex Hernández".

Más allá del tema legal, Ruz recuerda que también implicó interrumpir lo que estaba pauteado para ser transmitido. "En pantalla también nos cambia la figura, absolutamente".

El que tuvieran calidad y popularidad como parte de los encargados de elegir a los ganadores de las competencias, para Yudin implica una dificultad. "El un gran problema para la próxima edición es cómo lograr un jurado como el de 2017 para el próximo año".