Los asaltantes le robaron un anillo de más de 4 millones de dólares a Kim Kardashian.
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SANTIAGO.- A cinco meses de sufrir el millonario asalto en París, finalmente el canal E! Entertainment mostró el momento en que Kim Kardashian rompió el silencio y habló por primera vez del hecho.
Durante un episodio de su reality show "Keeping Up With The Kardashians", la socialité le contó a sus hermanas Khloe y Kourtney los detalles del asalto, incluyendo el momento en que creyó que iba a ser violada y asesinada.
"Lo que pienso ahora, después de darle mucha vuelta, es que probablemente había un grupo que nos estuvo siguiendo durante todo el viaje. Estaba en Snapchat y conté que estaba sola y que todos iban a salir. Así que supongo que ellos sabían que Pascal (Duvier, el guardaespaldas) saldría con Koutney y que yo estaría sola... Tenían esta ventana con una oportunidad y simplemente la tomaron", explicó.
Según recordó, escuchó pasos de personas subiendo las escaleras, mientras ella estaba en cama. En ese momento preguntó quién estaba ahí, pero como nadie respondió, sintió cierta tensión. "Sabía que algo no estaba bien", aseguró.
Fue cuando vio a dos sujetos vestidos como policías entrar al lugar, junto al conserje, quien estaba atado de las manos y tenía la llave de su habitación. "Lo que supe después, cuando hablé con él es que le preguntaban en francés, '¿Dónde está la esposa del rapero? ¡Déjanos entrar a su habitación!'. Él terminó siendo nuestro intérprete, porque yo no los podía entender y ellos tampoco a mí", explicó.
El conserje le dijo a Kardashian que entregara su anillo (valorado en más de 4 millones de dólares). Luego de que se los pasara, la llevaron al pasillo y ahí se percató que estaban armados. "Miraba la pistola. Tenía una fracción de segundo para tomar una decisión. O corría por la escalera y me disparaban por la espalda, o podía correr y que no me dispararan, y si el ascensor no se abre en el momento preciso y las escaleras estaban con llaves, estaría acabada. No había forma de salir", recordó.
Sin embargo, no hizo nada y después nuevamente la llevaron a la habitación. En ese momento Kardashian le pedía al conserje que les dijera que la dejaran vivir porque tenía una familia y dos guaguas.
Como no se quedaba callada, uno de los sujetos le tuvo que poner una cinta adhesiva en la boca. "Después me agarró de las piernas y, bueno yo no tenía ropa interior puesta. Me tiró a la cama y pensé 'Ok, este es el momento donde me van a violar. Me preparé mentalmente para eso, pero al final no lo hicieron", aseguró.
Inmediatamente sujetaron sus piernas con cinta adhesiva y le apuntaron a su cabeza. "Sabía que ese era el momento, pensé que me iban a disparar en la cabeza. Sólo esperaba que Kourtney pudiese seguir con su vida normal, después de que encontrara mi cadáver en la cama", afirmó.
Según explicó, sus últimos pensamientos antes que los asaltantes s fueran del lugar, fue que tenía una familia, hijos, esposo y madre; además que no iba a lograr salir con vida. Sin embargo, los sujetos nuevamente la agarraron y la encerraron en el baño.