Douglas en una fotografía de 2019.
EFE
Michael Douglas (76) está feliz de haber recibido la vacuna contra el covid-19, porque aquello le permitirá abandonar el sofá en el que se ha pasado toda la pandemia y que provocó que se convirtiera en una persona totalmente sedentaria.
"¡Nunca había visto tanta televisión como en el último año!", aseguró en una entrevista con AARP, organización sin fines de lucro que atiende las necesidades e intereses de las personas mayores de 50 años.
Pero eso no es todo. Según confesó, el hacer "básicamente nada" durante la crisis sanitaria, le robó su energía y, además, le ha provocado problemas de memoria.
"Mi memoria a largo plazo está bien, pero a corto plazo no tanto", sostuvo el actor.
El intérprete señaló que pensó que las dificultades con su memoria podrían ser una secuela de sus excesos en el pasado, sobre todo con la marihuana, pero lo descartó tras haber consultado con varios amigos suyos que fumaban mucho más que él.
"Solía culpar a la marihuana. Pero tengo algunos amigos que llevan fumando tanto tiempo como yo y tienen memorias fabulosas, así que no creo que ese sea el problema", explicó, para luego agregar: "Lo estoy investigando".
Sobre el futuro se manifestó ansioso de volver a viajar, trabajar, abrazar a sus amigos, debatir y aprender.
Asimismo, descartó de plano un pronto retiro. "El trabajo te mantiene en marcha, te mantiene alerta. Por supuesto, hoy en día, cuando miro alrededor del set, soy el más viejo (...) Un límite que sí establezco es 'no se permiten imbéciles'. Yo no trabajo con imbéciles. No tengo tiempo para eso", concluyó.
