SANTIAGO.- El ex Presidente de Cataluña, Carles Puigdemont, emitió esta mañana una declaración desde Bélgica, hasta donde viajó esta semana junto a siete ex consejeros del Gobierno regional destituido, luego de que la fiscalía española los acusara por el delito de rebelión.
En una comparecencia en el Club de Prensa de Bruselas -una sala con capacidad para 50 personas, pero con la presencia de 150 periodistas- el líder leyó una declaración en tres idiomas, español, francés y catalán, en la que aseguró que validará las elecciones regionales del próximo 21 de diciembre, convocadas por el Gobierno central.
"Vamos a respetar los resultados de las elecciones del 21 de diciembre como siempre se ha hecho, sin importar cuál sea el resultado. Quiero preguntarle al Gobierno español: ¿va a hacer lo mismo?", sostuvo.
"Yo quiero un compromiso del Estado, si va a respetar el resultado si le da un triunfo a las fuerzas independentista (...) El resultado se deberá aplicar, y el Gobierno español deberá respetarlo", añadió.
El fiscal general del Estado presentó este lunes una querella contra el ex presidente catalán y sus asesores, por delitos de rebelión, sedición y malversación. Ese mismo día, el ex líder de la Generalitat viajó a Bélgica, donde se puso en contacto con el abogado Paul Bekaert, quien llevó los casos de la ETA.
Puigdemont aseguró hoy que no pedirá asilo político en Bélgica y aseveró que su viaje a Bruselas se concretó porque en Cataluña no posee las garantías suficientes para su libertad por lo que, afirmó, por el momento no volverá y seguirá todo el proceso desde afuera.
"No es una cuestión de política, estoy aquí para actuar con libertad y con seguridad (...) Queremos estar aquí como ciudadanos europeos, no hay duda de nuestro compromiso al respecto. Vamos a ver, cada día hay novedades. Hemos decidido que la mejor forma de expresarse es estar aquí en la capital de Europa", señaló.
"No pido nada a la política belga (...) no hay ningún vínculo. Hay simpatías, pero eso viene de lejos. Quiero ser muy neutral en esto", agregó.
Asimismo, aprovechó la instancia para criticar las medidas tomadas por el Gobierno central respecto de la intervención en la autonomía catalana, asegurando que a pesar de que el Ejecutivo de Mariano Rajoy actuó con violencia, él no está dispuesto a seguir ese camino.
"Este Gobierno (catalán) ha preferido garantizar que no habrá enfrentamientos, que no habrá violencia. No se puede construir la república de todos desde la violencia. Si el Estado español quiere construir su proyecto desde la violencia, no nos puede arrastrar a nosotros", afirmó.
Por último, enfatizó que continuará por la senda de la democracia. "Es en el territorio de la democracia donde somos más fuertes. Es en el territorio de la democracia donde siempre hemos ganado, cuanto nos hemos podido enfrentar democráticamente siempre hemos ganado (...) Siempre que haya urnas, ahí nos encontrarán", sentenció.