La cita se llevará a cabo en el memorial Yad Vashem.
AFP
Un total de 41 jefes de Estado acudirán este jueves a la conmemoración del 75° aniversario de la liberación del campo de exterminio de Auschwitz y para hablar sobre el antisemitismo moderno que tendrá lugar este jueves en Jerusalén.
La cita de este jueves en el memorial del Holocausto de Yad Vashem, donde el presidente israelí Reuven Rivlin será el anfitrión, será "el mayor acontecimiento político" desde la fundación de Israel, según subrayó el vocero del Ministerio de Relaciones Exteriores israelí, Lior Haiat.
}Según el portavoz, finalmente va a acudir
el doble de asistentes de los que la organización esperaba. Como resultado de ello, el presupuesto especial, desbloqueado por el Ministerio de Finanzas y basado en 20 delegaciones, ha tenido que ser adaptado.
La asistencia sin precedentes obedece a "la importancia de la memoria del Holocausto y la lucha contra el antisemitismo hoy en día". "El antisemitismo es un problema mundial. No es solo un problema de Israel", recalcó Haiat.
Un diplomático israelí indicó que espera que la cita sirva de "catalizador" para la aceptación de la definición de antisemitismo formulada por la Alianza Internacional de Recuerdo del Holocausto (IHRA).
Dicha definición ha generado controversia por los ejemplos que ofrece, que sus detractores consideran que ahoga las críticas legítimas hacia el Gobierno de Israel.
Otro alto responsable diplomático añadió que con la presencia del Presidente ruso,
Vladimir Putin, Israel desea reconocer el papel del
Ejército Rojo en la derrota del nazismo y en la liberación de Europa oriental de los campos de concentración y exterminio, no solo Auschwitz.
Entre los asistentes confirmados figuran también, además del Rey Felipe VI, el Presidente francés, Emmanuel Macron, y el alemán, Frank-Walter Steinmeier, así como el vicepresidente estadounidense, Mike Pence, y el príncipe Carlos de Inglaterra, entre otros.
Recordar el holocausto
Los actos en Jerusalén han sido organizados por el Foro Mundial del Holocausto. Según su presidente, Moshe Kantor, el recuerdo es vital ya que a medida que el Holocausto comienza a quedar en el pasado "parte de su memoria se está olvidando y sus lecciones ya no se siguen aprendiendo".
Mantener la memoria del Holocausto y sus víctimas es uno de los principales cometidos del Memorial de Auschwitz, que acogerá un segundo acto conmemorativo
el 27 de enero, el 75 aniversario de la liberación del campo por las tropas soviéticas y fecha que actualmente conmemora el
Día Internacional de Recuerdo del Holocausto. Está previsto que unos 200 sobrevivientes acudan a los actos en el lugar del antiguo campo en Oswiecim, Polonia.
Las celebraciones de este año se producen en un momento de "aumento en las expresiones de odio y de antisemitismo violento, especialmente en Europa",según denunció el Foro Mundial del Holocausto. "Estamos construyendo una coalición mundial de líderes que puedan enviar un mensaje fuerte que sonará en todo el mundo de que el antisemitismo bajo todas sus formas es completamente inaceptable", sostuvo Kantor.
Controversia con Polonia
La cita en Jerusalén ha venido precedida por la controversia, después de que el Presidente de Polonia, Andrzej Duda, anunciara que no acudiría ya que los organizadores no lo han invitado a hablar, como sí harán los mandatarios de Rusia, Alemania y Francia.
Duda argumentó que
debería ser incluido en la lista porque, de los 6 millones de víctimas del Holocausto, tres millones fueron judíos polacos. Evitar que el Mandatario polaco hable sobre estas víctimas daña la memoria de esos polacos que arriesgaron sus vidas para salvar a judíos y de todos los polacos víctimas de la Segunda Guerra Mundial, denunció.
Yad Vashem respondió explicando que "los líderes que intervienen en este acontecimiento representan a las cuatro principales potencias de las Fuerzas Aliadas que liberaron a Europa y el mundo de la tiranía asesina de la Alemania nazi".
