La Fiscalía de México exoneró este jueves al exministro de Defensa Salvador Cienfuegos, arrestado en Estados Unidos por cargos de narcotráfico y devuelto a su país para enfrentar un posible juicio.
Se "ha determinado el no ejercicio de la acción penal en favor del general" Cienfuegos, indicó el organismo en un comunicado, en el que aseguró no haber hallado pruebas que incriminen al oficial.
El secretario de Defensa del gobierno de
Enrique Peña Nieto (2012-2018) fue detenido el pasado 15 de octubre en Los Ángeles y repatriado el 18 de noviembre, tras lo cual quedó en libertad.
La Fiscalía aseguró que Cienfuegos, de 72 años, "nunca tuvo encuentro alguno con los integrantes de la organización delictiva investigada" por las autoridades de Estados Unidos.
"Tampoco sostuvo comunicación alguna con ellos, ni realizó actos tendientes a proteger o ayudar a dichos individuos", prosiguió, en referencia a las acusaciones de la agencia antidrogas (DEA).
No hay evidencias
La justicia estadounidense acusó a Cienfuegos de cuatro delitos de narcotráfico y lavado de dinero por supuestamente haber ayudado al cartel H-2, una organización criminal mexicana extremadamente violenta, a "traficar miles de kilos de cocaína, heroína, metanfetaminas y marihuana a Estados Unidos" entre 2015 y 2017, a cambio de millonarios sobornos.
Pero después de que México protestó por no haber sido informado de la investigación contra el general, iniciada en 2013, una jueza de Nueva York aceptó un pedido inusual del gobierno de Donald Trump para retirar los cargos y dejar el caso en manos de la justicia mexicana.
La Fiscalía dijo igualmente que no encontró "prueba alguna" de que el exsecretario hubiera utilizado algún "equipo o medio electrónico, ni que hubiera emitido orden alguna para favorecer" a criminales, como sostiene la DEA, que lo identifica con el alias de "El Padrino".
Tampoco hay indicios sobre una "obtención de ingresos ilegales o acrecentamiento de su patrimonio fuera de lo normal", de acuerdo con lo que ganaba como funcionario, detalló el comunicado.
La Fiscalía, que tiene en su poder las "pruebas" entregadas por las autoridades estadounidenses, manifestó haber realizado "todas las acciones necesarias para obtener las evidencias indispensables".