Las competencias de los gobernadores deben estar garantizadas para que se produzca la elección.
El Mercurio (archivo)
SANTIAGO.- Definitivamente la idea de reemplazar a la actual figura de intendente y permitir la elección popular de un gobernador regional, ha causado más de un dolor de cabeza en el Gobierno.
Primero fue el retraso en su tramitación porque al interior de la Nueva Mayoría comenzaron las dudas, especialmente en el PPD, por el porcentaje de votos con el que serán electos y las competencias que le serán atribuidas a la nueva autoridad. Ahora se sumó la polémica entre los candidatos presidenciales del bloque, Carolina Goic y Alejandro Guillier, quienes se han reprochado la capacidad de liderazgo entre los parlamentarios que los apoyan.
Si bien ambos no se contraponen en sus posturas y han enfatizado en que hay que dejar atrás "los cálculos políticos" y así permitir la elección este año, este debate obligó al Ejecutivo a citar a un comité político extraordinario al respecto.
Pese a eso, el ex ministro del primer Gobierno de Bachelet y cercano a Guillier, Carlos Maldonado, criticó también la ausencia de liderazgo de la Mandataria, lo que fue respondido por la vocera, Paula Narváez.
"Nosotros no compartimos para nada la apreciación del ex ministro Maldonado: se requiere de todo el liderazgo que tiene la Presidenta para conducir y concretar las tremendas transformaciones que estamos llevando adelante como Gobierno", aseguró.
Los plazos
El proyecto que permite la elección se aprobó en septiembre del año pasado después de ocho meses de tramitación tras intensas negociaciones de La Moneda. Luego, en abril de este 2017, el Gobierno ingresó al Congreso una nueva iniciativa que establece los plazos de las autoridades en ejercicio para postular al nuevo cargo y la fecha en que se realizará la elección. Este proyecto actualmente está siendo discutido con suma urgencia en la Cámara de Diputados.
Justamente es ahí donde se genera el quiebre, pues para ser candidato a gobernador existen ciertas condiciones: alcaldes y concejales deben renunciar 90 días antes de la elección y los ministros y subsecretarios, deben dejar su cargo con un año de anterioridad.
Así como están los plazos de tramitación no alcanzarían a cumplir con ese requisito si la idea es que entre en vigencia a partir de las más próximas elecciones, es decir en noviembre.
Eso podría solucionarse con la aplicación de un artículo transitorio, y si bien la comisión de Gobierno Interior ya rechazó esa idea, algunos parlamentarios han propuesto que sea repuesto si llega a comisión mixta. Otra opción sería definitivamente aplazando los comicios para el 2020, aunque algunos sectores del oficialismo incluso se abrieron a que se realicen elecciones el 2018 especialmente para esta figura.
Atribuciones
Si se destraba este punto, surge otro problema: el gobernador regional no tendría mayores atribuciones si la tramitación continúa tal como está, ya que el proyecto que traspasa competencias va por un carril paralelo y tras el rechazo de la comisiones de Constitución, Hacienda y Gobierno. La idea de los parlamentarios es que se revise en comisión mixta.
"Los cambios que hizo la Cámara de Diputados son altamente inconvenientes...en la práctica no hay una transferencia de competencias, hay una delegación de competencias puesto que el Congreso solo renuncia a su facultad de establecer por ley cuales son la competencias del gobierno regional y se las entrega al Ejecutivo", dijo la semana pasada el senador Felipe Harboe, presidente de la Comisión de Constitución al explicar la decisión de la instancia.
