SANTIAGO.- El ex agente chileno ante la Corte Internacional de Justicia de La Haya, José Miguel Insulza, llamó a las autoridades chilenas a no exacerbar las tensiones en la relaciones bilaterales con Bolivia, luego de la expulsión de los nueve ciudadanos bolivianos que fueron condenados por el robo de un camión en la frontera entre ambos países.
En una carta enviada a
"El Mercurio", el ex ministro del Interior afirma que "sería un error mirar lo ocurrido como un simple incidente fronterizo o un hecho aislado. Al contrario, nos dice mucho acerca del deterioro de las relaciones entre Chile y Bolivia, provocado por el gobierno de La Paz; y nos hace temer que sucesos como este puedan repetirse, como parte de una ofensiva cuyo objetivo estratégico es contrario a nuestro interés nacional".
Sin embargo, enfatiza en que "también sería un error escalar el asunto de nuestro lado, haciéndole el juego a Evo Morales". Sus declaraciones surgen luego de que parlamentarios acusaran al Presidente boliviano de ser "cómplice de la delincuencia", por condecorar a los ciudadanos juzgados en Chile, y que retornaron durante este miércoles a su país.
En la misiva, Insulza hace énfasis en que Chile no debe responder a las provocaciones del país altiplánico con declaraciones. "Tenemos con Bolivia una frontera común (...) una vecindad permanente que es parte de la vida cotidiana de muchos chilenos y bolivianos. Proteger la paz entre nuestras naciones es un deber ineludible y no lo hacemos exacerbando nosotros el conflicto, ni en la retórica ni en la política".
En ese sentido, llama a las autoridades a ejercer una "política paciente y firme de contención" para mantener estables las relaciones bilaterales.
"Eso significa negar sistemática y pacíficamente el logro de sus propósitos e impedir que se cuestione el ejercicio de nuestra soberanía, mientras mantenemos nuestra disposición a dialogar sobre temas de la relación vecinal (salvo aquellos que están ya en una Corte) en condiciones de respeto e igualdad", asevera.
