SANTIAGO.- Una "reunión con carácter de urgente" fue lo que convocó la Confederación Nacional de Dueños de Camiones (CNDC) para este lunes 4 de septiembre, a las 11:00 horas en la sede de la confederación, en Almirante Barroso.
En ella participarán todos los dirigentes nacionales y regionales, en el contexto de las discusiones generadas luego de la quema de camiones en el sur del país.
Y es que la trama que han provocado los ataques incendiarios no ha estado exenta de polémicas.
Lo primero fueron 18 camiones quemados en La Araucanía el 19 de agosto, y luego 29 en la Región de Los Ríos, una semana después.
La Presidenta Michelle Bachelet afirmó que "combatiría la violencia" y que no toleraría que "grupos minoritarios afecten el trabajo que se lleva adelante por la paz en el sur".
El subsecretario del Interior, Mahmud Aleuy, calificó la situación como un "atentado" y el Gobierno anunció que se querellaría, invocando la Ley Antiterrorista.
Pero las reacciones del Gobierno no han podido aplacar la molestia de los gremios que agrupan a los camioneros del país, la CNDC y la Confederación Nacional de Transporte de Carga de Chile (CNTC), que tampoco han coincidido en una sola postura frente a la situación.
El 23 de agosto, sesenta camiones y buses protagonizaron un "bocinazo" frente al Congreso, para protestar por los atentados y la delincuencia. Avanzaron por las principales calles de la ciudad puerto, y a ellos se unieron decenas de vehículos.
Luego, el 29 de agosto, Sergio Pérez Jara, presidente de la CNTC, advirtió con una paralización si el Gobierno no cumplía con el petitorio en siete días, ya firmó que esperaba "que el Gobierno comprenda la gravedad de la situación y resuelva este grave problema".
Las peticiones incluían la vigilancia "permanente y efectiva" a través de personal policial, y que se designara un delegado presidencial "para enfrentar la quema de camiones en el sur de nuestro país y el robo de camiones y sus cargas en las rutas de Chile".
La advertencia fue considerada como un "ultimátum" y también duramente criticada por la CNDC, cuya postura frente a la situación ha sido más conciliadora. Su presidente, Juan Araya, afirmó que los camioneros no podían "ser los matones del barrio" y que no participarían del paro.
Un par de días después, Pérez negó que se tratara de un ultimátum, y pidió a la Presidenta "tomar en cuenta" el petitorio.
La reunión de mañana contará con la presencia de los integrantes del Directorio Nacional de la CNDC y de los presidentes de federaciones regionales, incluida la de la Región Metropolitana. Se espera que en la cita se analicen las medidas que adoptarán tras la quema de vehículos.