SANTIAGO.- La decisión del Gobierno de "congelar" -a través de la Ley de Presupuestos- el aporte por gratuidad que se entrega a los colegios que no cobran copago continúa generando repercusiones a nivel nacional.
Los sostenedores de algunos establecimientos adheridos a la gratuidad firmaron una carta, publicada este sábado en el diario
El Mercurio, en la que expresan su malestar por esta situación.
En la misiva explican que cuando se sumaron a este beneficio lo hicieron "sabiendo que los recursos comprometidos en la ley serían menores que el aporte de los padres. Lo hicimos porque trabajamos con familias muy vulnerables y porque nuestra vocación es entregar una educación de calidad que disminuya las brechas de inequidad en nuestra sociedad".
Sin embargo, aseguran que la mantención de la asignación de 2017 cambia sus planes iniciales, ya que contaban con un aporte superior para 2018: "Sobre la base de lo establecido en la ley, planificamos nuestros presupuestos orientados a lograr los fines educativos que nos motivan. No contar con estos recursos afecta gravemente la gestión educacional y es inconsistente con los objetivos planteados por el Gobierno y definidos en la Ley de Inclusión".
"Podemos entender la necesidad de priorizar los recursos públicos, pero nos parece una inconsistencia que la gratuidad de la educación superior se haga a costa de la inversión en los niños y niñas más vulnerables del sistema escolar", añaden los sostenedores en la carta, quienes hacen un llamado a las autoridades a "revertir" esta decisión.
