SANTIAGO.- Son decenas y decenas las publicaciones científicas que aparecen a diario en todos los idiomas y que reportan nuevos hallazgos en torno a lo que el SARS-CoV-2 puede provocar en el cuerpo: encefalitis —a nivel cerebral—, rash e inflamación de la piel, conjuntivitis —en los ojos—.
"Es tan nuevo que recién lo estamos conociendo", asegura a Emol la infectóloga de la U. de Chile, Jeannette Dabanch. "Sabemos que a veces tiene compromiso gastrointestinal, hace unos días se publicó un artículo caracterizando manifestaciones cutáneas, y los trastornos a nivel de olfato y gusto significan que hay compromiso a nivel del sistema nervioso central", dice.
En el fondo, aclara la especialista, no es nada nuevo. "Nos pasa con otros virus respiratorios, como por ejemplo la influenza, que no solo produce compromiso en el pulmón o las vías respiratorias, sino que puede comprometer otros órganos", detalla. A veces, dice, no es por acción directa del virus sino producto de la respuesta inflamatoria del cuerpo.
"Tenemos que ir conociendo efectivamente el nuevo coronavirus, que es un virus respiratorio porque su entrada la hace por las mucosas. Por eso lo buscamos inicialmente en las células del epitelio nasofaríngeo y orofaríngeo, pero puede producir, indirectamente quizás, compromiso en otro órganos. Eso lo estamos aprendiendo", explica.
El problema, señala, es que toda esta nueva información aparece demasiado rápido. "Es tanto lo que aparece que yo, honestamente, no he logrado ponerme al día en todo lo publicado y no creo que pueda hacerlo, porque es mucho", dice, y el personal médico, en general, ocupa su tiempo en enfrentar el virus desde los recintos hospitalarios.
La doctora, entonces, plantea una interrogante: si los médicos están ocupados atendiendo pacientes con distintos niveles de gravedad, ¿cómo se informan sobre los nuevos hallazgos de la literatura científica?
"Ayudar al diagnóstico"
Además de la cantidad de publicaciones, Dabanch habla de un problema de confiabilidad derivado de la rapidez. "Hay que analizar también la calidad, porque en este minuto hay tanta información que incluso se publica sin lo que se llama 'revisión de pares'. Hay que revisar la calidad de los datos y mirar con prudencia", advierte.
Por eso es que, dice, han señalado que pueden ayudar. "Las sociedades científicas hemos ofrecido colaboración al Minsal en esta área. Hemos ofrecido esa ayuda: se puede colaborar con equipos técnicos que puedan ir poniendo al día a todo el personal sanitario", señala.
"Las sociedades científicas hemos ofrecido colaboración al Minsal en esta área. Hemos ofrecido colaborar con equipos técnicos que puedan ir poniendo al día a todo el personal sanitario"
Jeannette Dabanch
Al respecto, el expresidente del Colegio Médico e integrante de la Mesa Social covid-19, Enrique Paris, cree que se trata de una iniciativa que se podría abordar en la instancia. "Me parece una buena idea, bastante propositiva que nos puede ayudar a detectar otros síntomas que puedan orientar hacia el diagnóstico", afirma a Emol.
El actual decano de la Facultad de Ciencias de la U. Mayor respalda la visión panorámica de Dabanch. "Cuando surgió el tema de la anosmia —pérdida de olfato—, que es un síntoma neurológico, de inmediato se abrió otra vía diagnóstica, y también se han estado viendo síntomas digestivos, porque los coronavirus en animales los pueden producir, aunque no en la misma proporción que los respiratorios", dice.
"Los virus en general, y sobre todo en los niños, son capaces de llegar a cualquier lugar, tienen ese comportamiento. Un niño con sarampión puede desarrollar encefalitis, y otro con peste cristal convulsiones. Me parece buena idea abrir un trial de investigación, de reporte de síntomas o signos que puedan ayudar al diagnóstico", añade.
