Un hombre en situación de calle se trasladó en bus hasta Caldera el viernes.
LUN (referencial)
La Municipalidad de Caldera se encuentra preocupada de identificar y aislar a los contactos de dos pacientes confirmados con covid-19 que podrían haber expuesto al virus a más ciudadanos, el primero porque tomó un bus desde Copiapó hacia Caldera el pasado viernes y el segundo porque se fugó en dos oportunidades del control de las autoridades sanitarias.
En el primer caso, la alerta fue dada por la alcaldesa de Caldera, Brunilda González, quien llamó a todos los pasajeros que viajaron en el bus Casther del viernes 26 de junio a las 19:30 horas, en su recorrido entre Copiapó y su comuna, a realizar aislamiento preventivo. En el vehículo se trasladó un hombre en situación de calle que había sido diagnosticado con covid-19 y además identificado como contacto estrecho de otro caso positivo.
"A este paciente, por parte de la autoridad sanitaria, se le refiere la posibilidad de utilizar la residencia", explicó el director del servicio de Salud local, Claudio Baeza, a El Diario de Atacama. El cupo fue otorgado en Caldera y no en Copiapó, donde el hombre de encontraba. Al momento del contacto, el paciente afirmó que podía llegar hasta la residencia al día siguiente. "Él, en la desesperación, en la noche decide trasladarse", añadió Baeza.
"En ningún momento se le dispuso o se le solicitó que hiciera el traslado solo, sino muy por el contrario, estaba todo coordinado, incluso con el Cesfam de Caldera, para poder hacer un traslado seguro, pero él toma la decisión de irse personalmente. Además es un paciente que tiene algunos trastornos conductuales", precisó. El personal de salud evalúa en él "algunos trastornos psiquiátricos".
Otro caso que preocupa a la Municipalidad de Caldera es el de un paciente que se fugó en dos oportunidades: la primera fue el viernes, luego de ser notificado como contacto estrecho de un caso confirmado, y la segunda el sábado, después de ser trasladado a una residencia sanitaria para llevar a cabo su aislamiento. El mismo día, su propio diagnóstico fue confirmado.
Según Baeza, el paciente presenta consumo problemático de alcohol. "Es un caso bien complejo", explicó el director del servicio de Salud. Luego de fugarse de la residencia, "el usuario se puso a beber todo el día, a las 15:00 horas tuvo contacto con siete personas aproximadamente, según el estudio epidemiológico que hizo el Cesfam de Caldera, las cuales ya están bajo seguimiento por parte del equipo de atención primaria", explicó.
El hombre, que realizó amenazas al equipo de salud y fue descrito como un caso de "difícil manejo" por sus características violentas, fue buscado por personal de las Fuerzas Armadas y de Seguridad Ciudadana de la municipalidad, siendo encontrado el día domingo y trasladado de vuelta hasta la residencia sanitaria.