El jefe del Departamento de Epidemiología, Rafael Araos, señaló este domingo que la herramienta de conteo de fallecidos en pandemia que se empleó bajo la administración del ex ministro de Salud, Jaime Mañalich, llegó a un punto en que dejó, de ser efectiva, aunque acotando que, a su juicio, no corresponde calificarla "de buena o mala".
Los dichos ocurren luego que el otrora secretario de Estado señalara a El Mercurio que no se sentía responsable de los decesos a raíz del covid-19, y que dicho medio publicara la declaración que Araos entregó como testigo al Ministerio Público por la indagatoria que se sigue contra diversas autoridades por el conteo de los fallecimientos.
"El exceso de mortalidad era cuestión de tiempo que se comenzara a observar, ocurre en toda pandemia (...) el sistema que usaba el ministro, sea cual fuere, no dio el ancho por lo complejo de la situación", fueron algunos de los dichos que entregó al ente persecutor.
Ya hoy, Araos aseguró que lo publicado "son extractos de la declaración", que "hay harto de peras y manzanas" y que se "mezcla en ese relato lo que es la opinión mía, en relación a los fallecidos y a los casos".
"En cuanto al recuento de fallecidos, esta es una enfermedad nueva, distinta, lamentablemente para todos es una enfermedad que no sigue modelos conocidos (...) Inicialmente, como en cualquier pandemia, se trata de poner en servicio o curso distintos sistemas para poder informar a las autoridades como población acerca de la trayectoria de la pandemia", partió explicando.
"Fue el mecanismo que se pudo poner en marcha, funcionó inicialmente, después no funcionó porque no fue capaz de capturar toda la información y se buscó una mejor alternativa".
Rafael Araos.
Sobre el sistema de recuentos ocupado bajo la administración de Mañalich, el cual no dependía de él, agregó que este "fue capaz inicialmente de ir informando los fallecidos que iban ocurriendo, pero a medida que la pandemia aumentó, el número y la cantidad de datos que tuvimos fue muy grande, y es evidente que no fue capaz de capturar esa información. Es evidente, hay una puesta al día importante. Y eso motiva a que se busquen alternativas que terminaron en lo que tenemos ahora que es un sistema súper sofisticado, casi en tiempo real, que nos permite tener información de primera calidad".
Recalcó que aquel "fue el mecanismo que se pudo poner en marcha, funcionó inicialmente, después no funcionó porque no fue capaz de capturar toda la información y se buscó una mejor alternativa".
"Yo creo que estamos en la mitad de la pandemia, es muy difícil evaluar la efectividad de una medida o de un mecanismo actualmente y el tiempo nos irá enseñando qué era lo que había que hacer. Esto es algo que a todos nos pilló sin estar preparados, no solamente a Chile, a cualquier país, y se hizo lo que se pudo en la medida que se contaba con más información y recursos", cerró.
