El ministro del Interior, Rodrigo Delgado, aseguró este viernes que no hubo un error comunicacional de parte del Gobierno en la forma en que dio a conocer los detalles de la resolución exenta del Ministerio de Salud que dejó en claro que las vacunas contra el covid-19 estarían disponibles solo para quienes residan en nuestro país.
Luego de las dudas que surgieron al respecto y que motivaron la intervención de hasta cinco autoridades del Ejecutivo, el jefe de gabinete realizó un repaso de cómo se gestó la medida y desestimó que exista una responsabilidad del ministro de RR.EE., Andrés Allamand, quien fue el encargado de dar a conocer los detalles del documento.
En entrevista con Radio Pauta, Delgado recordó que "
esto comienza el fin de semana, cuando yo recibo algunas alertas de que en países limítrofes se estaban organizando algunas personas, sobre todo de mayor poder adquisitivo, para poder viajar a Chile como turistas a vacunarse".
"Ahí converso con el Presidente, le manifiesto mi inquietud y él me encarga que hagamos algunas reuniones, que levantemos la información y finalmente se toma la decisión de poner freno a cualquier posibilidad de turismo de vacunas", añadió.
Según el secretario de Estado, "esto lo fuimos analizando, estuve con el canciller Allamand y el ministro Prokurica en Colchane y aprovechamos de conversar este tema. Cuando llegamos de vuelta, el canciller, porque esto tiene una connotación más bien internacional, salió a hacer una vocería en la línea de lo que habíamos hablado".
"Él deja muy claro que no hay posibilidad de turismo de vacunas, entonces el canciller cumple con ese objetivo en esa vocería. El tema está en que había una resolución, que él explica lo que ocurre con los migrantes irregulares y esa resolución lo que decía era que los migrantes irregulares no tenían posibilidad de vacunarse", dijo.
Defensa de Allamand
En ese contexto, el titular de Interior aclaró que "lo que no salía en esa resolución, y el canciller tampoco tenía como saberlo, porque no es su área, era que los migrantes irregulares, de acuerdo a un decreto del año 2016, ingresan a Fonasa y eso les da obviamente la posibilidad de vacunarse”.
"Eso no es que sea un error comunicacional, lo que pasa es que el foco de la comunicación del canciller era el turismo de vacunas, hacer un llamado internacionalmente a que el turismo de vacunas estaba cerrado. Pero a las pocas horas se precisó tanto por el jefe de extranjería, el ministro Paris y quien habla", añadió.
La idea de las aclaraciones, señaló, era explicar que "los migrantes irregulares, que dicho sea de paso, estamos hablando de 40 mil o 50 mil personas que habiendo tenido varios procesos de regularización en el último tiempo no se acogieron a él,
esas personas inclusive van a poder ser vacunadas porque tienen derecho a Fonasa".
A su juicio, era importante integrarlos a todos, "porque el covid no hace diferencias. Una persona que es un migrante irregular, que está trabajando en Chile, formal o informal, esa persona puede ser un vector de contagio. Entonces, no podemos correr el riesgo de que esa persona quede sin vacuna".
"Eso es parte del principio de asegurar la salud a todos los chilenos. Ahora, el canciller hizo lo que tenía que hacer, anunció el cierre del turismo de vacunas y eso lo hizo muy bien y la precisión con respecto a este grupo de migrantes irregulares ya fue definida por el Gobierno en varias vocerías, así que hoy ya está bastante claro", concluyó.