El Presidente Sebastián Piñera participó este viernes en el primer Desayuno Nacional de Oración por la situación actual de nuestro país, organizado por la Oficina Nacional de Asuntos Religiosos (ONAR) del Ministerio Secretaría General de la Presidencia (Segpres).
En la instancia, se conectaron telemáticamente el Mandatario; el ministro de la Segpres, Juan José Ossa; el director de la Oficina Nacional de Asuntos Religiosos, Jeremías Medina; el capellán de la Iglesia Católica, Pablo Palma; el capellán de la Iglesia Evangélica, Daniel Anabalón; y el capellán de la Comunidad Judía, Eduardo Waingortin.
Los participantes oraron por Chile, por los funcionarios de la salud y por aquellas familias que han perdido a sus seres queridos. Además, contaron con la intervención musical desde Houston del ganador de varios premios Grammy, el pastor Marcos Witt, y con el "Coro Tabernáculo de Cristo" de más de cien voces.
"Sin duda, han sido tiempos muy duros para todos y creo que muchos de los que somos creyentes nos hemos acercado un poco más a Dios, no sólo para pedirle por nuestras familias, sino que también por aquéllos que no conocemos y que están sufriendo y, también, por nuestra sociedad y nuestro país", dijo el Presidente Piñera.
Y agregó que "sin embargo, esta pandemia nos ha acercado a Dios para valorar y agradecer por tantas cosas que antes quizás dábamos por seguras y que hoy sabemos apreciar como nunca, como, por ejemplo, el valor de la vida, la salud, nuestras familias, nuestros amigos, nuestra sociedad".
El ministro Ossa, encargado de llevar las relaciones del Gobierno con las iglesias, envió un afectuoso saludo a todos quienes participaron del desayuno de oración.
"Estamos viviendo tiempos muy difíciles, no sólo en Chile, sino que en todo el mundo. Estamos viviendo una pandemia que afecta la salud, la vida de nuestros compatriotas y a nuestras familias. Por eso, el rol de las iglesias es clave, históricamente han contribuido en todos los países, y particularmente en Chile, a canalizar este tipo de crisis y contener a los chilenos y chilenas. El compromiso de este Ministerio es mantener este desayuno durante todos los años y sigamos intensificando todas las instancias de oración", finalizó Ossa.
Se espera que esta ceremonia se instaure como tradición y se repita año a año durante el mes de abril.
