Los alcaldes Felipe Delpín y Claudia Pizarro y los convencionales Cristián Monckeberg y Jorge Baradit son algunos de los que asistirán al encuentro.
Emol
Este martes en la municipalidad de La Granja tendrá lugar una inédita reunión entre un grupo de alcaldes y convencionales constituyentes electos para iniciar el trabajo entorno a una propuesta de descentralización para la nueva Constitución.
La iniciativa, liderada por el edil de La Granja y vicepresidente de la Asociación Chilena de Municipalidades, Felipe Delpin, busca iniciar un trabajo transversal entorno al diseño de una propuesta constitucional en materia de equidad territorial, redistribución del poder político, mayor autonomía de los gobiernos locales y nuevos mecanismos de participación ciudadana vinculante.
A la cita han sido convocados, entre otros, las alcaldesas Claudia Pizarro (La Pintana) y Carolina Leitao (Peñalolén), los alcaldes Germán Codina (Puente Alto), Gonzalo Durán (Independencia), Maximiliano Ríos (Lo Prado), Carlos Cuadrado (Huechuraba) y Nibaldo Meza (Peñaflor), y los constituyentes Cristián Monckeberg, Patricio Fernández, Fuad Chahin, Felipe Harboe, Jorge Baradit, Daniel Stingo y Giovanna Grandon (Tía Pikachu).
Según explicó Delpin, la iniciativa surge desde la necesidad de abordar la crisis de representación y creciente falta de legitimidad institucional como foco central del proceso constituyente. En ese sentido el jefe comunal señala que la arquitectura constitucional debe contemplar las bases para avanzar en una mayor justicia territorial, distribución o descentralización del poder y ampliación de la libertad, discrecionalidad y autonomía de las personas desde los niveles de organización territorial más básicos.
"Ello en aras de reconectar a la institucionalidad política y administrativa con urgencias y expectativas ciudadanas y ampliar los grados de participación de las personas en los asuntos locales y nacionales de interés e impacto directo sobre sus vidas", especifica el edil.
Algunos de los temas a contemplarse en la reunión y posterior trabajo serían el consagrar en el texto constitucional que Chile sea un Estado Unitario Descentralizado; la autonomía política y administrativa de las regiones y comunas; autonomía fiscal donde las regiones y las comunas gocen de independencia para determinar la composición y estructura de sus gastos en todas aquellas materias que sean de competencia regional y municipal, respectivamente; y partipación ciudadana territorial (con mecanismos consultivos vinculantes).
