Un cambio de estrategia fue la que implementó el Gobierno este viernes en el barrio Lastarria, la cual incorporó nuevas líneas de acción para evitar que se repitieran los acontecimientos registrados hace una semana, tales como la presencia de barricadas, destrozos de locales y enfrentamientos entre manifestantes y fuerzas policiales.
Así, el nuevo plan contempla una mesa de trabajo permanente, fortalecer la presencia de Carabineros y contar con una coordinación permanente a través de WhatsApp.
En línea con aquello, esta mañana el ministro del Interior, Rodrigo Delgado, hizo un positivo balance del plan de seguridad aplicado y valoró la coordinación que hubo con los locatarios de los barrios gastronómicos, turísticos y comerciantes del centro de Santiago.
Postura a la que se sumó el presidente de la Asociación Gremial de Emprendedores y Empresarios del Barrio Lastarria, Alfonso Molina, quien señaló a Emol que el día de ayer "afortunadamente, fue una gran sorpresa".
Y resaltó que "efectivamente, la estrategia fue distinta, Carabineros estuvo muy presente durante todo el día, yo creo que eso ayudó muchísimo porque fue una situación preventiva. Es decir, ocuparon una estrategia de prevención por un lado, de posicionamiento y de presencia, y posteriormente en la tarde noche no hubo ningún desmán, no hubo ninguna complicación".
Asimismo, indicó que "no tuvimos ningún tipo de manifestación o problemas en el barrio, no hubo quema de nada".
Tras ello, aparte de rescatar el aporte en que se tradujo el cambio de estrategia, apuntó que "también hubo mucho apoyo de la comunidad, estuvimos todos muy alerta, coordinados por chat tanto los vecinos como los comerciantes, y eso también ayudó a que Carabineros pudiera cometer las acciones correspondientes para que ayer nada sucediera. Creo que incluso se hicieron controles todo el día y eso también ayudó mucho".
En tanto, desde la perspectiva de Cristián Correa, chef del restaurante Mulato y parte de la directiva de la asociación, "cualquier estrategia que se cambie, que se ocupe, que se renueve tiene que perdurar en el tiempo. Ayer estuvo bien, pero uno tiene que tener a seguridad si es de verdad es una estrategia permanente o efectivamente es como para palear lo que podría haber pasado una semana después".
Y si bien sostuvo que "la estrategia se verá con el tiempo, si es que la cosa resulta", afirmó que "efectivamente se vio que hubo cambio, había vigilancia y no hubo mayores incidentes".
Igualmente, el empresario gastronómico puntualizó que "lo que ocurrió el viernes pasado no ocurría hace mucho tiempo (…) con respecto a la normalidad que veníamos trayendo, el viernes pasado se fue de las manos".
A lo anterior se sumó Molina, quien indicó: "Después de una época muy tranquila, nosotros creemos que esto fue un impasse puntual y esperamos que así siga siendo".
"Pero lógicamente, no hay que bajar los brazos y esperaríamos que la ciudadanía siga condenando los hechos de violencia, siga aportando por un proceso democrático a través de los conductos que se utilizan en una democracia, que son las elecciones, los plebiscitos, y las decisiones que se tomen a través de la asamblea constituyente y el Congreso", añadió.
No obstante, el presidente del gremio del barrio Lastarria también se refirió sus proyecciones y subrayó: "creemos que si esto sigue así, nosotros tenemos un muy buen futuro dentro de lo que se puede en la zona cero".
Quien también abordó la situación que afecta al barrio Lastarria fue el presidente de la Asociación Chilena de Gastronomía
, Máximo Picallo.
"Los locatarios han hecho inversiones para volver a abrir, aquí también hay un esfuerzo del Estado por pintar y hermosear todo este lugar de manera que vuelva a ser lo que fue y, por lo tanto, hay muchas ganas de que esto vuelva a ser lo que era y el esfuerzo, hay que decirlo, es encomiable de los locatarios, de los trabajadores del sector, de los mismos vecinos, de lo que es recuperar lo que fue este barrio que también es una mezcla entre barrio residencial y cultural", expresó a CNN Chile.
Luego declaró que "si hay algún local que tuvo que cerrar, existen otros emprendedores que han querido hacer la apuesta por ubicarse ahí, así que esperamos que de ahora en adelante, lo único que veamos de este barrio sea una recuperación".
Finalmente, consultado por sus impresiones respecto a un eventual cierre de la calle Lastarria hacia la Alameda, Picallo dijo que "si el cierre es simplemente por evitar el tema de protestas, pienso que es como una medida que puede tener un efecto incluso contrario. Yo creo que lo que tenemos que hacer como país es erradicar la violencia de nuestros barrios, y darle seguridad a los vecinos es mucho más importante que poner vallas o un cierre en ese sector".
