Luego de un profundo debate, la comisión de DD.HH. de la Convención Constitucional aprobó por unanimidad el reglamento que regulará las audiencias que llevará a cabo la instancia, rechazando de esa forma uno de sus puntos, que establecía la exclusión de aquellas organizaciones que algunos acusaban de promover mensajes de odio o negacionismo.
El texto, que fue elaborado por la subcomisión de audiencias, fue presentado por los convencionales Manuel Woldarsky y Constanza San Juan (Lista del Pueblo), quienes dieron cuenta de 307 solicitudes de entrevistas, siendo consideradas 277 en total y desestimando 30 de ellas, por presentar solicitudes en blanco, incompletas o repetidas.
Entre las aceptadas, Woldarsky detalló que hubo 4 que fueron declaradas inadmisibles, siguiendo tres criterios: prohibición del negacionismo, tomar en cuenta declaraciones de personas que representan a esas organizaciones
que promueven discursos de odio o negacionistas y que estas intervenciones fueran de público conocimiento.
Siguiendo dicho razonamiento, el representante del distrito 10 mencionó a las instituciones afectadas: La Fundación Jaime Guzmán, la fundación evangélica Confamilia, el Movimiento Acción Republicana, vinculado al Partido Republicano de José Antonio Kast, y la fundación Cuide Chile.
"A criterios de esta subcomisión, los dichos de estas organizaciones son contrarios a la doctrina internacional de DD.HH. (…) y consideramos que atentan contra grupos históricamente discriminados y que han sido víctimas de violaciones", explicó el convencional, junto con destacar que las citas comenzarán mañana a las 17:15 horas y que finalizarán el 24 de agosto a las 19 horas.
Tras ello, se inició un debate al respecto. Patricia Politzer (INN), quien pese a no ser parte de la comisión, hizo uso de su derecho a voz para expresar su rechazo hacia la exclusión de esas instituciones. "No tengo cercanía alguna con estas organizaciones ni con sus planteamientos. Sin embargo, quiero recalcar mi rechazo a la censura y la libertad de expresión".
"No les vamos a censurar como ustedes han hecho toda la vida en base a sus creencias. Estamos acá para terminar con la homo y transfobia, pero sin censurarles".
Pedro Muñoz, convencional PS
"Los oídos de la ciudadanía no requieren de protección especial. Vengo a pedir que se escuche a estas organizaciones del mismo modo de las que fueron aceptadas”, dijo, siendo respaldada posteriormente por varios convencionales, como
Jorge Arancibia (IND-UDI), quien planteó que "Politzer me robó la intervención".
"Quiero agregar solamente que esta marginación o censura de estas 4 instituciones le hacen daño al sistema y lo tenemos que cuidar. Estas son 4 organizaciones son queridas y respetadas por mucha gente y nosotros tenemos la responsabilidad y obligación de escucharlos, aunque no pensemos con lo que ellos van a expresar", añadió.
Un punto importante de la discusión lo aportó Pedro Muñoz (PS), quien siendo parte de las minorías sexuales señaló que "quiero decirle a los homofóbicos, que los pecadores y abyectos estamos en la Convención, que pese a toda la discriminación estamos aquí. Somos al menos 8 y estamos acá para construir un pacto social justo".
"No les tenemos miedo y no les vamos a censurar como ustedes han hecho toda la vida en base a sus creencias. Estamos acá para terminar con la homo y transfobia, pero sin censurarles. Les esperamos aquí", aseguró, recibiendo aplausos por parte de la mayoría de los presentes en la convención.
En la misma línea, Ruth Hurtado (IND-RN), sostuvo que "hay organizaciones que defienden de alguna manera la familia de una manera distinta, el matrimonio, y eso no quiere decir que inculquen odio, porque aquí todos pensamos de manera distinta. aquí lo que tiene que primar es el respeto a las opiniones diferentes".
Derecho a ser oído
Luego fue el turno del coordinador de la comisión, Roberto Celedón (Apruebo Dignidad), quien manifestó que "un derecho humano fundamental es el derecho a ser oído, entonces me parece muy delicado que nosotros como comisión de DD.HH. podamos transgredir un derecho fundamental como es a ser oído".
"En relación a la exclusión, no estoy de acuerdo y me alegra mucho escuchar a Pedro Muñoz, porque demuestra un espíritu y visión que ennoblece nuestro trabajo, porque en definitiva aquí estamos llamados a construir un nuevo Chile y que estos parámetros que estamos construyendo sean acogidos por el conjunto de la sociedad", recalcó.
En respuesta, Woldarsky señaló que "
el informe que acabo de entregarles no busca censurar, buscar aplicar los principios que esta comisión ha votado. Frente al derecho a ser oído, yo quisiera considerarlo mi distinguido contradictor, pero es necesario tener en cuenta otro principio que no hay libertad para los enemigos de la libertad".
Más tarde, llegó la réplica de Celedón: "Llamo a la reflexión sobre una frase que escuché, que no hay libertad para los enemigos de la libertad (…) No podemos decir una frase que es contraria a la filosofía de los DD.HH. Aquel que dice que este es el enemigo, se instituye como el censor del resto de la sociedad".
El resto de las intervenciones se dieron en el mismo tenor. Felipe Harboe (PPD) recordó que en derecho “el más cruel de los criminales tiene la bilateralidad de la audiencia. No existe debido proceso cuando no se escucha a ambas partes (…) el derecho a ser oído es un derecho humano básico".
María Rivera (Lista del Pueblo) afirmó que "no tengo ningún problema en escuchar a todas las organizaciones también, pero yo quiero ser concreta. No podemos hablar fácilmente a hablar de democracia, cuando esta ha estado tutelada por los grupos económicos. Los ciudadanos nunca han sido oídos".
"Llamo a la reflexión sobre una frase que escuché, que no hay libertad para los enemigos de la libertad (…) No podemos decir una frase que es contraria a la filosofía de los DD.HH."
Roberto Celedón, convencional Apruebo Dignidad
"
No hemos sido escuchados a quienes se nos violaron los DD.HH. durante 17 años. Los mismos partidos políticos jamás nos han escuchado. Le digo a Harboe que ha legislado contra el pueblo. El discurso de Politzer es hermoso, pero no es real, porque los medios de comunicación no permiten la libertad de expresión", expresó.
En la misma línea, Carolina Videla (PC) sostuvo que "si bien concuerdo respecto de lo que tiene que ver con no aceptar el negacionismo, es cierto que el derecho a ser oído es fundamental y tiene que ser garantizado. Me hubiese encantado escuchar la defensa respecto de poder abrir estos espacios para victimas de violaciones a los DD.HH.".
En tanto, Manuela Royo (PI - Apruebo Dignidad) recordó que "vivimos en un país durante mucho tiempo hubo censura, persecución, encarcelamiento y tortura y no queremos que pase nunca más (…) Me padece que estamos dispuestos a escuchar a todos y todas, ellos hicieron presentes puntos acordados por esta comisión".
"La semana pasada, cuando interpelé a la convencional Hurtado se me dijo que era fascista y dictadora por las mismas organizaciones. Una cosa es que discutamos si se van a presentar o no, o si permitiremos que en una audiencia se mienta. Propongo escucharlas, pero no permitiremos discursos de odio y afectaciones a la honra de las personas", enfatizó.
Luego fue el turno de Giovanna Roa (RD), quien indicó que "tengo la peor opinión de las organizaciones cuyo rechazo está sobre la mesa. Es aberrante que una organización como Confamilia publique en su página que los homosexuales buscan que se legalice y “naturalice” el pecado y las aberraciones sexuales".
No obstante, recalcó que "es importante que las escuchemos para que demos un debate sobre la libertad de expresión". Para zanjar el punto, San Juan explicó que "esto no es un acto de censura, es un acto de prevención para que no usen esta plataforma para difundir mensajes de odio".
En esa línea, propuso que esas organizaciones envíen sus presentaciones por escrito para poder revisar el tenor de sus propuestas y que se comprometan "a no hacer discursos de odio", lo cual fue respaldado por todos los miembros de la instancia, con 15 votos a favor y sin expresiones en contra ni abstenciones.
