Cientos de migrantes han llegado al país en los últimos días, tras extensas caminatas, por el desierto incluso, hasta el terminal de buses de Antofagasta. Allí las autoridades sanitarias han aplicado test de antígemos para detectar eventuales casos de covid-19.
Muchos de ellos han asegurado que vienen por ofertas laborales o a visitar a familiares, y algunos sostienen que seguirán rumbo a la zona central.
Este masivo arribo fue abordado por el ministro del Interior, Rodrigo Delgado, quien dio un punto de prensa, tras reunirse con la presidenta de la Convención Constitucional, Elisa Loncón, para abordar temas de seguridad.
"El flujo migratorio está condicionado, primero, por los países de origen, de donde vienen caminando muchos de ellos,
y tiene que ver con las crisis que atraviesan", afirmó, subrayando que Chile tiene una nueva legislación migratoria para evitar
ingresos irregulares que dejan fuera de toda protección legal a quienes busan nuevas oportunidades.
Es por esto que el secretario de Estado enfatizó que los extranjeros que están llegando al país, pricipalmente a Antofagasta y otras zonas de la zona norte, deben "sincerar" el motivo de su viaje.
"Siempre lo hemos dicho, las personas que vengan deben hacerlo sincerando a qué vienen, y para eso están los visados correspondientes que puede solicitar en los distintos consulados fuera del país", recordó, subrayando que "el ingreso clandestino, irregular, por parte del gobierno tiene un solo concepto, rechazarlo".
"No estamos disponibles para que la gente ingrese de manera irregular o clandestina", complementó Delgado, quien añadió que "por lo mismo, muchas de las expulsiones que hemos realizado se fundan, sobre todo administrativas o judiciales, con ingresos irregulares".
"Por eso nosotros pedimos que no haya cambios de criterio en las cortes (de justicia del país), donde muchas veces dejaron aceptar el ingreso clandestino como motivo de expulsión", afirmó.
