Los ministros de Educación y Segpres estuvieron presentes en la votación junto a los respectivos subsecretarios.
Aton
Eran 89 votos los que requerían las
observaciones del Presidente Sebastián Piñera al proyecto que establece que el kínder sea obligatorio. Sin embargo, la iniciativa no logró convencer al mínimo de diputados necesarios y el veto aditivo impulsado por La Moneda
fue rechazado.
Con esto
se cae lo denominado como "el corazón" de la iniciativa y prácticamente queda solo en su enunciado, generando dudas en el Ejecutivo de si incluso es prudente promulgarlo.
Desde el Gobierno buscaban que en la
Democracia Cristiana estuvieran los respaldos, sin embargo, dicha bancada se dividió y algunos rechazaron no dando el quórum que se requería.
El
ministro de Educación, Raúl Figueroa, apuntó a
"intereses electorales, personales y mezquinos" de parte de la oposición para rechazar el proyecto, poniéndolos por "sobre el interés general de nuestros niños". Esto lo hizo cuestionando directamente al
candidato de Apruebo Dignidad, Gabriel Boric (CS), quien hoy votó en contra al igual que la bancada de la DC. "El kínder obligatorio es un proyecto que apunta con total precisión al máximo bienestar de nuestros niños, que se dirige a corregir desde la base las inequidades que luego se manifiestan en nuestro sistema educativo, que permite efectivamente emparejar la cancha y darles a todos las mismas oportunidades. Hoy día diputados de oposición optaron por darle la espalda a esos niños y generar políticas que lamentablemente impiden el máximo desarrollo de sus capacidades", sostuvo.
El secretario de Estado explicó que tras este rechazo
"el mandato constitucional de a través de esta ley hacer concreto el kínder obligatorio ya no es posible en este período y lo que es más claro miles de niños deberán seguir esperando porque son víctimas de un cálculo mezquino que ciertamente no tiene cabida en el debate educacional".
Entre las modificaciones que hizo el Mandatario, de carácter aditivo, estaba duplicar el presupuesto asignado a infraestructura para la readecuación de los recintos educacionales a $4 mil millones. Luego del rechazo, el veto avanzará de todos modos al Senado, pero solo por cumplir con el trámite.
La iniciativa buscaba materializar la reforma constitucional aprobada en 2013 que estableció la obligatoriedad de ese nivel, dejándolo sujeto a la aprobación de esta ley. Entre las aprensiones de los parlamentarios que ya habían rechazado el proyecto en comisión mixta es la inviabilidad que existe principalmente en zonas rurales para acceder a este nivel parvulario y que por ende se fomentara la desescolarización.