Asimismo se detalla que del total de víctimas fallecidas, un 87,3% corresponde a hombres y un 12,6% a mujeres. Siendo la mayoría adultos, concentrándose en personas de entre 30 y 59 años (51,7%%) y luego entre 18 y 29 años (35,1%).
Mientras que el 93,7% son chilenos y el 6,1% son extranjeros, siendo de Colombia, Perú y Haití las nacionalidades más frecuentes de víctimas fallecidas.
Mayoría de hombres
Los imputados, al igual que las víctimas, son mayoritariamente hombres (92%) y sólo un 8% son mujeres. De ellos la gran mayoría de los imputados son jóvenes, lo que a juicio de la Fiscalía Nacional confirma la existencia del denominado "desistimiento delictivo".
Esto señala que mientras más edad se tiene, disminuye la posibilidad de cometer este tipo de delitos. El organismo explica que la participación en homicidios aumenta a finales de la infancia, se incrementa en la adolescencia y luego disminuye durante la década de los 20 años. De hecho, 1 de cada 2 imputados por homicidio consumado tiene entre 18 a 29 años de edad.
Sobre la nacionalidad de los imputados, se revela que sólo el 3,8% corresponde a extranjeros, es decir, muy por debajo del promedio de extranjeros que habitan en el país.
Respecto del contexto en que se cometieron los homicidios, el 37% de las víctimas falleció en medio de un conflicto interpersonal que no corresponde a Violencia Intrafamiliar (IVF), por ejemplo conflicto entre amigos o vecinos, el 13,5% falleció en contexto de otras actividades delictivas (como víctima de un robo o mientras cometía un delito), el 12% murió en manos de un familiar (homicidio interpersonal VIF) y un 10% por conflictos entre pandillas o grupos organizados.
4.593personas murieron producto de un homicidio entre 2016 y 2020
El homicidio interpersonal VIF afecta mayoritariamente a las mujeres, es decir, 1 de cada 2 mujeres fue víctima de un familiar. Los hombres, en cambio, fallecen preferentemente por un conflicto interpersonal no VIF, es decir, en contexto de riñas o peleas.
En cuanto a las armas utilizadas según la tipología del homicidio, destaca el caso de las víctimas de los grupos organizados o pandillas, donde 8 de cada 10 fallecen producto del uso de un arma de fuego, mientras que el uso de un arma punzante o cortante es más frecuente en los homicidios relacionados con VIF.