El ministro del Interior y Seguridad Pública, Rodrigo Delgado, valoró la detención de los presuntos responsables de crimen del sargento de Carabineros Francisco Benavides, ocurrido en medio de una emboscada.
El uniformado murió en junio pasado, cuando acudió a un operativo de despeje de barricadas en la Ruta R-35 de Collipulli.
"Quiero valorar el trabajo investigativo de meses, mucha gente dice que no se hace nada, que no hay resultados, hay que entender que las investigaciones toman su tiempo, hay que ser muy acusiosos, porque, entre oras cosas, el levantamiento y aseguramiento de evidencias es clave", afirmó en Antofagasta.
Asimismo dijo "valorar que se haya cumplido esta etapa tan importante y repudiar que alguien piense que la manera de enmendar diferencias, de reivindicar una causa, pueda incluir matar a alguien".
El ministro Delgado, quien realiza una gira a la Macrozona Norte junto a su par de Desarrollo Social, Karla Rubilar, donde moniterean la implementación de las medidas para paliar la crisis migratoria, advirtió: "No vamos a parar hasta que esas personas paguen por lo que han hecho".
Los detenidos son los hermanos Matías y Heriberto Ancalaf, y serán puestos a disposición del Juzgado de Garantía de Collipulli. En la audiencia, la Fiscalía de Alta Complejidad de La Araucanía dará a conocer los antecedentes que constan en la investigación para sustentar la imputación de homicidio.
También fue detenido en flagrancia el padre de los imputados, Víctor Ancalaf, por infracción a la Ley de Armas. De acuerdo a las primeras versiones de la policía, se le habrían incautado armas y municiones de guerra.
Por su parte, el subsecretario de la cartera, Juan Francisco Galli, informó que amplió la querella contra Víctor Ancalaf, incluyendo el delito infracción a la Ley de Armas.