Tras el triunfo de Gabriel Boric en la segunda vuelta de las elecciones presidenciales, su vocero,
Giorgio Jackson, se refirió a la situación de los denominados
presos del estallido, asegurando que
"el compromiso es que todas esas querellas se levanten". Las palabras del diputado de Revolución Democrática no cayeron bien en Chile Vamos, donde calificaron la declaración como un "error" y una mala señal. "
Me parece un error profundo que la primera señal del gobierno de Gabriel Boric sea retirar las querellas cuando la gente está pidiendo certezas, fuerza y convicción para enfrentar la delincuencia", sostuvo
Juan Antonio Coloma (UDI). En tanto,
Tomás Fuentes (RN) sostuvo que "
algunos de los formalizados por quema el metro o incendiar un tren en Antofagasta
ya están condenados. ¿Significa esto que los indultarán?".
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