En un experimento que no podríamos calificar de saludable, un entrenador de fitness estadounidense, subió y bajó de peso en forma extrema en el plazo de 52 semanas para poder comprender qué pasaba con sus clientes con sobrepeso.
Drew Manning realizó esta particular experiencia que presentó en el programa “Good Morning America” a comienzo de enero y los efectos fueron impactantes.
Cuando inició el experimento pesaba 87,4 kilos (y una cintura de 86 centímetros) y mostraba unos marcados six pack. A las 26 semanas, en cambio, pesaba 116,1 kilos y la cintura era de 120 cms.. Tras ponerse nuevamente en forma, en la semana 52 había recuperado su apariencia inicial.
Todo el cambio se puede ver con detalle en su
página web Fit2Fat2Fit.
Según explica CNN Internacional, la prueba más que un experimento de subir y bajar de peso, le permitió a Manning comprender qué pasaba con quienes recurrían a él para estar en forma. Todo eso después de dejar de hacer ejercicio y comer comida chatarra.
Su esposa Lynn señaló que era muy crítico de esas personas, mientras que el entrenador afirmó en su libro Fit2Fat2Fit que antes “estaba convencido que la gente utilizaba la genética o excusas similares como una muleta”.
Tras la tremenda transformación que sufrió, Manning pasó por los cambios de ánimo y falta de energía para moverse que manifiestan las personas con sobrepeso.
De hecho, su esposa confirmó que estando gordo dejó de ayudar en la casa y jugar con su hija de 2 años.
“Lo más importante es que aprendí que no se trata sólo de lo físico. No es sólo sobre el plan de alimentación y los entrenamientos. La clave está en lo mental y los problemas emocionales. Me di cuenta que esos problemas son reales”, explicó.
Al final, el experimento lo volvió más humilde.
