Cremas borrador, varita mágica cosmética, rejuvenecedor instantáneo y hasta Photoshop en pote, han sido algunos de los nombres con los que las mujeres alrededor del mundo han bautizado a las milagrosas Blur creams. Y es que muchas las consideran como una verdadera revolución en el mercado de la cosmética, tal como en su momento lo fueron las BB y luego las CC creams.
"Es una tendencia. Así como nacieron las BB y las CC, las Blur creams empezaron básicamente en Estados Unidos y se están expandiendo rápidamente", afirma Claudia Lagos, directora de marketing de L'Oréal Paris, marca que ya vende el producto en el mercado chileno.
Pero, ¿qué es lo que se logra con ellas? "Se trata de una crema finalizadora, que nos ayuda visualmente a desaparecer arrugas, imperfecciones, poros abiertos e incluso el molesto brillo del rostro. Simplemente es como si nos hicieran un Photoshop, el resultado es casi milagroso", asegura la maquilladora
Nicole Benado.
Según Claudia Lagos, el secreto de las Blur creams es que alisan ópticamente la piel, haciendo que la luz se difumine en el rostro. "En ese sentido, son distintas a las BB o CC creams, porque ésas son un poco más como maquillaje o cremas hidratantes con color y propiedades específicas, como las CC que corrigen ciertos tonos de pigmentación de la piel", añade.
"Estas cremas, a diferencias de las CC creams, no se consideran un tratamiento (…) Tampoco tienen color como las BB creams", complementa la maquilladora.
Las Blur creams se pueden usar de forma diaria luego de limpiar e hidratar el rostro, si se trata de pieles normales, o inmediatamente después de la rutina de limpieza, en el caso de las grasas, para así evitar aplicar demasiadas capas de diferentes productos sobre la piel.
Asimismo, se pueden usar en todo el rostro o bien en zonas específicas, donde se quiera disimular líneas de expresión, arrugas, poros o cualquier irregularidad.
"Las mujeres más famosas y maquilladores también las usan mucho en la zona de los hombros, escote y espalda, para lograr un efecto de piel lisa y uniforme", dice Claudia Lagos. Eso sí, aunque funcionan para esconder marcas de acné, si éstas están pigmentadas o bien la piel tiene manchas, las Blur creams no las camuflará.
Respecto a la textura del producto, la directora de marketing de L'Oréal Paris la califica como "bastante peculiar". "Es muy suave, aterciopelada, se esparce muy bien en el rostro. No es una textura fluida que se absorbe, porque justamente la gracia es que produce un efecto en la piel. En el fondo, la persona siente que tiene el producto aplicado", detalla, y aclara que no deja una sensación "acartonada" como ocurre, por ejemplo, con las bases de maquillaje. "Justamente el efecto es todo lo contrario: la piel queda muy suave, mate y uniforme", asegura.
Por su parte, Nicole Benado afirma que la textura de las Blur creams es "muy densa", ya que contiene bastante silicona. "Hay que recordar que no ayudan a resolver el problema de las imperfecciones, aunque tampoco lo agravan, sino que lo borran durante unas ocho horas", señala la maquilladora.
Sin embargo, el caso de Miracle Blur es un poco diferente, ya que el producto de L'Oréal Paris pertenece a la gama antienvejecimiento Revitalift. "Tiene factor de protección solar 30 -lo que reduce drásticamente la aparición de arrugas a largo plazo, porque los rayos UV son la primera causa de aparición de arrugas- y también agentes antiarrugas como pro-retinol A u otros ingredientes de la línea Revitalift", explica Claudia Lagos. Esto significa que además de transformar de forma instantánea la piel, esta Blur cream tiene propiedades antienvejecimiento a largo plazo.
Lancôme y Garnier son otras dos marcas que cuentan con sus Blur creams. La última lanzará la suya en Chile durante el primer trimestre de 2014 y su tecnología es similar a la de L'Oréal Paris, ya que cuenta con reflectores ópticos que al difundir la luz en todas las direcciones, hacen que las arrugas, las imperfecciones, los poros abiertos o los brillos se reduzcan.
