SANTIAGO.- Alrededor de mil millones de personas en el mundo tienen sobrepeso, y unas 600 millones son obesas, según la Organización Mundial de la Salud. Tratando de imaginar esa gran población de gente, alarma saber la serie de complicaciones que se asocia a la acumulación excesiva de grasa en el cuerpo; solo por nombrar una, se vive entre 1 y 8 años menos.
Eso indicaron científicos de Oxford el año pasado, al publicar el análisis de casos más amplio realizado hasta el minuto, según señalaron.
Tras comparar el riesgo de muerte con el índice de masa corporal de 4 millones de adultos no fumadores, llegaron a la conclusión de que
las personas con sobrepeso pierden un año de vida, en promedio, y aquellas con sobrepeso moderado pierden cerca de tres años.
Según uno de los autores de la investigación, Richard Peto, en los casos de obesidad severa se habla incluso de hasta 8 años menos de vida.
La responsabilidad de criar personas sanas
Casi paralelamente al estudio de Oxford, en julio de 2016, se dieron a conocer dos investigaciones acerca de cómo afecta la obesidad a los más pequeños. Y para la preocupación de todos, se encontró una posible relación entre un índice de masa corporal elevado y un mayor riesgo de cáncer de colon y sufrir una apoplejía por coágulo a edad temprana.
Ante estas revelaciones,
los científicos hicieron un llamado urgente a los padres, ya que son los principales responsables de que un menor de edad desarrolle sobrepeso y se transforme más adelante en un nuevo adulto con obesidad. Uno que, por cierto, podría vivir 8 años menos por la inexistencia de patrones saludables a lo largo de su vida.
