EMOLTV

Pubertad precoz, una alteración hormonal cada vez más presente en los niños chilenos

Un estudio demostró que altos niveles de una hormona, serían determinantes para identificar a menores de ocho años en riesgo de presentarla. Sin embargo, también hay otras señales de alerta a las que poner atención.

13 de Marzo de 2017 | 09:57 | Por Tatiana Berckhoff Cádiz, Emol
imagen
Fotobanco
SANTIAGO.- Con la llegada de la pubertad se da inicio a un nuevo ciclo en el cual los niños deben enfrentar una serie de cambios fisiológicos. Sin embargo, hay veces en que estas transformaciones se adelantan en el tiempo, dando origen a la denominada "pubertad precoz".

Los especialistas estiman que un 28% de la población infantil chilena presenta este fenómeno. En este sentido, un reciente estudio realizado, entre otros, por la Universidad de Chile y el Instituto de Nutrición y Tecnología de Alimentos (INTA), demostró que los altos niveles de la hormona IDHEA -encargada del desarrollo- serían determinantes para identificar niños y niñas, menores de ocho años, en situación de riesgo.

Algo que se agravaría en el caso de las niñas menores de siete años, ya que conforme a la investigación liderada por Verónica Mericq, endocrinóloga infantil de Clínica Las Condes, cuando el proceso de adrenarquia -responsable de los cambios fisiológicos- se ve acelerado, son ellas las que experimentarían cambios como el desarrollo sexual, la aparición de vellos, y la emanación de olores que no corresponderían a su edad.

En el caso de los niños, los que presenten una alteración de la hormona antes de los nueve años, ven su crecimiento interrumpido también a temprana edad.

"Se sabe que la maduración sexual sin tener la madurez psicológica suficiente provoca mayor probabilidad de realizar conductas de riesgo", sostiene la especialista.


A pesar de que se desconocen las causas exactas del por qué de la anormalidad, la profesional aclara que la mayor parte de los casos están asociados al sobrepeso u obesidad en los niños. En efecto, la grasa facilita la producción de estrógenos e insulina, dos hormonas que afectan al desarrollo sexual.

Qué cosas presentes en la vida cotidiana podrían adelantar el desarrollo de los niños


Pero los altos niveles de la hormona IDHEA no es lo único que incide en el adelanto de la pubertad, como explica Carolina Sepúlveda, endocrinóloga de Clínica Alemana, quien detalla que ciertos alimentos, condimentos y esencias también podrían influir.

"La presencia de estrógenos en productos diseñados para adultos, pero utilizados en niños, serían uno de los responsables de la estimulación temprana en los menores", destaca la especialista.

Entre los factores que podrían adelantar la pubertad en los niños están:

- La soya, por los disruptores que están presentes en el ambiente y que podrían contaminar los productos que contengan esa planta. Además, su uso prolongado acentuaría los efectos.

- La lavanda, que comúnmente se encuentra en los productos para recién nacidos.

- Aceite de té, que está presente en los productos de pediculosis (piojos).

- Extracto placentario muy utilizado en productos de belleza como shampoo o acondicionadores, y que se absorbe a través del cuero cabelludo o la piel.

Signos de alerta


Sepúlveda destaca que un factor importante para prevenir la pubertad precoz, es mantener un peso adecuado en los niños, es decir, "ni flacos, ni gordos, normales".

Además, los padres deben prestar atención a ciertas señales de advertencia de que algo no anda bien en el desarrollo de sus hijos. Algunos de estos signos son:

- Desarrollo temprano del botón mamario
- Presencia de vello pubiano o axilar a temprana edad
- Olor axilar
- Acné


¿Existe algún tratamiento o solución? La respuesta es sí, cuando aparecen los primeros signos de desarrollo antes de lo normal, se debe acudir cuanto antes a un endocrinólogo quien determinará la causa de la pubertad precoz e indicará los pasos a seguir.

Por lo general, el tratamiento más común es mediante inyecciones analógicas de LHRH, una hormona sintética que frena la pubertad, las cuales pueden ser administradas mensualmente o trimestralmente, con un costo que va desde los 100 mil pesos hasta los 300 mil pesos cada una, según el lugar donde se realice.

La duración del tratamiento dependerá de la edad que tenga el menor, pero en promedio debería ser por tres años como máximo.
EL COMENTARISTA OPINA
¿Cómo puedo ser parte del Comentarista Opina?