La historia popular cuenta que el explorador y conquistador Juan Ponce de León hipotecó gran parte de su vida buscando la mítica fuente de la juventud, y si bien ese lugar nunca fue hallado, hay algunos destinos en el mundo que parecieran tener el don de dar una vida más sana y extensa a sus habitantes. Es el caso de la bella localidad emplazada en la Península de Nicoya, en Costa Rica, una zona que además de su belleza natural destaca por tener una de las poblaciones más longevas del mundo, con expectativas de vida que superan incluso al de países más desarrollados.
Si bien no existe una explicación científica, lo cierto es que para muchos este sector del país centroamericano hace bien al espíritu y el cuerpo. De ahí que Nicoya sea recomendado como el lugar ideal para vivir unas vacaciones de bienestar.
Alejado del estrés de las ciudades, esta zona de Costa Rica ofrece a sus visitantes verdaderos paraísos naturales para entregarse al descanso, junto con instalaciones confortables y equipadas para recibir a los viajeros.
“uno de los secretos de la población de la Península de Nicoya, es que se camina mucho, se come bien y muy sano; pero además la gente vive de forma sencilla”
COCHA
En el Departamento de Caribe y Centroamérica de COCHA explican que “uno de los secretos de la población de la Península de Nicoya, es que se camina mucho, se come bien y muy sano; pero además la gente vive de forma sencilla”.
Prueba de ello, dicen en la agencia de turismo, es que "sólo en este rincón de Costa Rica viven más de 40 personas que superan los 100 años de vida”.
“Entre las posibles causas de este fenómeno están el clima seco de la zona, el acceso a frutas y verduras de excelente calidad, mucha actividad física y lo más importante, un gran sentido de comunidad”, agregan desde COCHA.
De ahí que no resulte extraño que cada vez más turistas, provenientes de todo el mundo, escojan esta zona de Costa Rica para pasar sus vacaciones, más aún cuando en esta península se encuentran algunas de las mejores playas de todo el país, como Tamarindo, Carrillo o la playa de Nosara.
Además de eso, hay varios centros especializados en tratamientos estéticos que son un paraíso para quienes gustan de los masajes y spa. La idea es que el visitante pueda alcanzar un “estado de bienestar” y hacer una pausa a la cotidianidad del día a día, algo fundamental para mejorar su calidad de vida.
Para quienes gustan de la vida al aire libre y el contacto con el mundo rural esta zona de Costa Rica también resulta ser el destino perfecto, ya que además de ser uno de los núcleos turísticos más destacados del país por sus hermosas playas, que llaman a descansar bajo el sol, también sobresale por su potente actividad agrícola con producción de maíz, frijoles, yuca y leche.
Los más aventureros también disfrutan de sus áreas escarpadas, sus manglares y las ensenadas. Imposible no visitar el Parque Nacional Barra Honda, donde se hallan las famosas cuevas subterráneas de Costa Rica. Otra opción es observar la llegada de tortugas marinas en las costas del Refugio Nacional de Vida Silvestre Ostional, un verdadero espectáculo de la naturaleza.
